Cientos de muertos en varios países

El ciclón Eta azota Florida tras arrasar Centroamérica

El paso del huracán, que ha afectado a más de 2,5 millones de personas, ha agravado la crisis humanitaria en la región de América Central

Vista de satélite de la tormenta Eta en Florida.

Vista de satélite de la tormenta Eta en Florida. / periodico

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El paso del huracán Eta en Centroamérica, que ha afectado a más de 2,5 millones de personas, ha agravado la crisis humanitaria en una región ya afectada por la pandemia, ha advertido la Federación Internacional de la Cruz Roja (FICR), y ahora golpea con fuerza Florida.

Según el Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos, Eta genera "fuertes vientos, intensas lluvias y peligrosas marejadas" en varias zonas del sur de Florida y de los cayos de este estado. La tormenta podría intensificarse en huracán de categoría 1 -con vientos de entre 119 y 153 km/h- durante su paso por la península de Florida, en el sudeste de Estados Unidos. Una tormenta tropical es considerada huracán cuando genera vientos de al menos 119 km/h. Todo el sur de Florida estaba bajo advertencias o avisos de huracán, incluyendo Miami y Fort Lauderdale.

En zonas urbanas del sur de Florida ya ha provocado inundaciones, debido a las intensas precipitaciones. Miles de personas se han quedado sin electricidad y otras muchas han sido evacuadas de las zonas costeras.

1,7 millones de personas lo han perdido todo

En el primero de esos países, 1,7 millones de personas, el 20% de la población, han perdido sus posesiones, no tienen acceso a comida y están bebiendo agua contaminada, en lo que, según el portavoz de FICR, Matthew Cochrane, es el peor desastre natural de la nación desde el Huracán Mitch en 1998. Las autoridades de la región han reportado la muerte de al menos 261 personas tras el paso del huracán, que ha impactado especialmente a Honduras, Nicaragua y Guatemala.

El acceso a asistencia médica, así como las pobres condiciones de higiene y el acceso a agua potable son la prioridad para FICR, que ha advertido del peligro de que surjan brotes de dengue o de malaria entre las personas que han tenido que ser evacuadas de sus hogares.

Además, se está monitorizando de cerca otra tormenta que se está desarrollando en el Atlántico que podría afectar a las mismas áreas que intentan recuperarse del huracán Eta. FICR envió desde Panamá un avión y dos camiones con 98 toneladas de ayuda humanitaria a Nicaragua y Honduras, además de 21,8 millones de dólares a los tres países más afectados, con el objetivo de ayudar a 75.000 personas durante 18 meses.

"Estamos hablando de millones de personas afectadas en siete países. La necesidad de ayuda humanitaria es dramática", añadió el director de operaciones en América de la FICR, Felipe del Cid.