RENOVACIÓN EN EL REINO UNIDO

El laborismo abre nuevo capítulo lejos de Corbyn

El líder laborista británico Keir Starmer.

El líder laborista británico Keir Starmer. / periodico

Begoña Arce

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El Partido Laborista rompe con la era Jeremy Corbyn. El nuevo líder, Keir Starmer, pide a quienes dieron la espalda al laborismo en las urnas que echen "una nueva mirada" al que siempre había sido su partido, porque ahora hay "un nuevo liderazgo". Elegido el pasado mes de abril, Starmer aprovechó este martes el discurso de cierre de la conferencia anual laborista, este año virtual, sin aplausos ni ovaciones, para marcar distancias con la rígida línea de extrema izquierda de su predecesor.

"Seamos brutalmente honestos con nosotros mismos. Cuando se pierde una elección en una democracia es porque se merece", afirmó desde la ciudad de Doncaster, uno de esos antiguos feudos laboristas del llamado red wall  que pasaron a manos de los conservadores. La derrota con Corbyn en diciembre fue la peor para el partido desde 1935. Los laboristas han perdido cuatro elecciones seguidas. "Le hemos otorgado a los tories una década de poder", lamentó Starmer. "Eso significa que tenemos que cambiar y eso es lo que estamos haciendo". 

Patriotismo y seguridad nacional

En un tono sobrio y directo, el que ha ejercido durante años como abogado de derechos humanos no dejó lugar a dudas de su patriotismo, algo que se había echado en cara a su antecesor. "Amamos este país como lo amáis vosotros. Este es el país en el que he crecido y en el que voy a hacerme mayor". Destacó la importancia de la familia, la seguridad y los empleos justamente retribuidos. Su partido defenderá la justicia social y recuperará la confianza, perdida con Corbyn, en asuntos de defensa. "Nunca jamás el laborismo va a ir a una elección sin que se confíe en él en cuanto a seguridad nacional", subrayó.

La crisis del coronavirus, que no le permitió celebrar siquiera su nombramiento como líder, ha sido prácticamente el único tema sobre el que ha debatido hasta ahora con Boris Johnson en la Cámara de los Comunes. Preciso, documentado, huyendo de la demagogia y la grandilocuencia, sus preguntas inquisitoriales han hecho estragos en la reputación de un primer ministro incapaz de darle un dato o una réplica adecuada. El último sondeo publicado el sábado por YouGov sitúa a los laboristas con un 40% de respaldo, a la par que los tories. "La incompetencia de este Gobierno está llevando a este país hacia atrás", señaló al hacer recuento de los fiascos en la gestión de Johnson con la crisis sanitaria o el acuerdo del brexit. Los laboristas deben ganarse, además, la confianza de los británicos en la gestión de la economía, algo que en lo que siempre van por detrás de los tories.

Divisiones internas

Starmer está dando los primeros pasos en el que será un largo camino para recuperar al electorado. Al golpear tanto a Johnson como a Corbyn está dejando claro que su mirada está puesta en el futuro, y el objetivo es sacar al laborismo "de las sombras de la oposición" para volver al poder. Su tarea comienza por unir al partido, ferozmente divido por las corrientes internas, el brexit y las denuncias de antisemitismo. "Una oportunidad pérdida", fue la reacción al discurso del nuevo líder del grupo laborista Momentum, donde se refugia el corbynismo.