Pasajeros del crucero aislado en Brasil buscan salir hacia sus países de origen

Un crucero en cuarentena desde el jueves en la ciudad brasileña de Recife por la confirmación de un caso de coronavirus y la sospecha de otro, aguarda la autorización para repatriar a sus 607 ocupantes, entre ellos tres españoles y once latinoamericanos.

Según desvelaron fuentes diplomáticas de España, el cónsul general para la región Nordeste de Brasil, Gonzalo Fournier Conde, se desplazará en las próximas horas a Recife para dar "asistencia" a los tres españoles que están en el navío. A su vez, el embajador español, Fernando García Casas, ya entró en contacto con las otras Embajadas y con las autoridades de Pernambuco para dar una "solución rápida y segura".

Caso positivo

El barco zarpó de Salvador el último miércoles y atracó el jueves en Recife. La mayoría de los pasajeros realizaron paseos turísticos en la ciudad y al retorno un hombre de 78 años, de nacionalidad canadiense, presentó síntomas compatibles con el COVID-19 y fue trasladado al Hospital Portugués de esta capital.

Las autoridades sanitarias brasileñas determinaron que el crucero debería permanecer atracado y aislado hasta conocerse los resultados de los exámenes practicados al paciente, que dieron positivo. Otra pasajera de 60 años, de nacionalidad irlandesa, presentó los mismos síntomas y también fue internada.

El paciente del crucero que fue confirmado con coronavirus está en estado "grave" y se esperan los resultados de la segunda pasajera, que está en observación en el mismo hospital privado de Recife, manifestaron a EFE fuentes médicas.

El crucero, que debería haber salido el viernes pasado de Recife con destino a Fortaleza, capital de Ceará, para continuar su recorrido por el Atlántico, permanece aislado en el puerto y de acuerdo con las mismas fuentes los pasajeros comienzan a dar señales de desespero y claustrofobia por su situación.

Repatriación de ciudadanos

El mayor número de los ocupantes es de nacionalidad filipina (157, todos ellos tripulantes), seguidos de los pasajeros británicos (109) y estadounidenses (103). Fuentes del Gobierno federal indicaron a EFE que el Reino Unido pretende retirar a los pasajeros británicos en un avión particular.

De confirmarse el vuelo de retirada de los británicos con algunos pasajeros europeos más, la Embajada de España ya inició la gestión para la logística interna dentro del aeropuerto con la empresa española Aena, que desde el 3 de marzo administra la terminal aérea de Recife, subrayó la fuente diplomática española.

Según la misma fuente, el cónsul español está coordinando las acciones para la eventual retirada de las personas del navío con su homólogo general de Italia en Recife, Gabor de Zagon, país que tiene tres pasajeros y ocho tripulantes dentro del crucero.