EPIDEMIA GLOBAL

Alemania cierra los comercios que no sean básicos pero evita el confinamiento

Merkel justifica la adopción de "medidas drásticas para ralentizar el contagio" de la pandemia

Sillas y mesas apiladas en una cafetería de Berlín.

Sillas y mesas apiladas en una cafetería de Berlín. / periodico

Andreu Jerez

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“Son medidas inéditas en nuestro país”. Con estas palabras ha anunciado este lunes la cancillera alemana, Angela Merkel, una nueva batería de medidas para intentar reducir el contacto entre los ciudadanos y frenar la <strong>propagación del coronavirus. </strong>En Alemania ya hay más de 6.000 casos de infectados confirmados por el Instituto Robert-Koch así como 13 muertos.

El Gobierno federal ha acordado con los ejecutivos de los 16 estados federados el cierre de los siguientes locales: bares, discotecas, cines, salas de juego, burdeles, centros deportivos públicos o privados, gimnasios o cualquier tipo de comercio que no ofrezca productos de primera necesidad. También quedan prohibido atender a encuentros deportivos al aire libre así como cursos en escuelas de cualquier tipo, ya sean públicas o privadas, y usar jardines y parques públicos.

Las guarderías también irán cerrando paulatinamente a lo largo de esta semana en aquellos estados que todavía no lo hubieran ordenado. También tendrán que cerrar sus puertas las iglesias, sinagogas, mezquitas y cualquier otro tipo de templo religioso. Serán los gobiernos regionales los que decidan cuándo entra en vigor estos cierres y por cuánto tiempo.

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Alemania permitirá, sin embargo, la apertura de supermercados, tiendas de bebidas, mercadillos semanales, farmacias, droguerías, gasolineras, bancos y cajas de ahorro, peluquerías, lavanderías, oficinas de correo, estancos, kioscos, tiendas de productos para mascotas, así como grandes almacenes de jardinería o de productos para la construcción. La prohibición de abrir los domingos quedará además eliminada temporalmente para los comercios que sí pueden abrir sus puertas. El objetivo es asegurar el abastecimiento de productos de primera necesidad para la población.

Restaurantes abiertos

A diferencia de otros países europeos, Alemania sí permitirá que los restaurantes y hoteles sigan funcionando siempre y cuando no sea para fines turísticos, y con una serie de condiciones: los locales tendrán que garantizar la distancia de seguridad entre sus clientes y para ello deberá limitar el aforo. Los restaurantes podrán abrir sus puertas entre las 6 de la mañana y las 6 de la tarde.

Todas las medidas persiguen el objetivo de reducir el contacto entre ciudadanos para frenar el número de contagios y al mismo tiempo garantizar una cierta continuidad de la vida económica, el suministro energético y la atención médica. El Gobierno alemán pide expresamente a la ciudadanía prescindir de cualquier viaje de placer tanto dentro como fuera del país. Todas estas medidas se suman al cierre de edificios públicos y al control parcial de las fronteras terrestres que ha entrado en funcionamiento este lunes.

Berlín prescinde de momento del confinamiento de los ciudadanos y apuesta por reducir la oferta de consumo y ocio para evitar que la gente tenga incentivos de salir de sus casas. Merkel lo resumió este lunes con una de sus pragmáticas frases: “Necesitamos medidas drásticas para ralentizar el contagio”.