Estados Unidos

Un juez ordena mejorar las condiciones de detención de los migrantes en Arizona

La decisión de 40 páginas se aplica a los ocho centros de detención de inmigrantes de la Patrulla Fronteriza en el Sector Tucson

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El Periódico

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Un juez federal determinó que las condiciones que sufren los inmigrantes indocumentados detenidos en centros de detención de la Patrulla Fronteriza en el Sector Tucson violan sus derechos, prohibiendo que los inmigrantes sean detenidos por más de 48 horas si ya han sido procesados.

La determinación emitida por el juez federal David Bury también ordena a la agencia federal proporcionar colchonetas limpias y sábanas delgadas en un periodo de 12 horas después de su detención.

La decisión de 40 páginas se aplica a los ocho centros de detención de inmigrantes de la Patrulla Fronteriza en el Sector Tucson, el cual cubre 90 % de la frontera de Arizona con México.

"La corte determina que las condiciones de detención en las celdas de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP, a la que está adscrita la Patrulla Fronteriza), especialmente aquellas que impiden el dormir por varias noches, son presumiblemente punitivas y violan la Constitución", escribió el juez en su decisión.

Bury indicó que los migrantes enfrentan condiciones "peores" que las prevalecientes en otros centros de detención incluyendo cárceles.

El juez federal admitió que pueden existir circunstancias extremas que retrasen el procesamiento de los migrantes, pero en su opinión los incrementos en el flujo migratorio en la frontera sur son una condición "crónica" que no justifica que las personas sean obligadas a dormir en el piso.

La decisión del juez es en respuesta a una demanda interpuesta originalmente en 2015 por la Unión Americana de Libertades Civiles (ACLU) en Arizona y otros grupos defensores de los derechos de los migrantes en contra de la Patrulla Fronteriza.

Los demandantes denunciaron precarias condiciones que los migrantes tienen que soportar en los centros de detención de la corporación. Presentaron imágenes donde se puede ver a los migrantes durmiendo en el piso de concreto, prácticamente uno sobre otro.

En un juicio que se llevó a cabo el pasado mes de enero, dos mujeres inmigrantes dieron su testimonio quejándose de las bajas temperaturas dentro de los centros de detención, mejor conocidos entre los migrantes como "hieleras".

También se quejaron de un mínimo acceso a cuidado médico y de la baja calidad de la comida que recibieron.

A este respecto, el juez Bury ordenó a la agencia federal proporcionar "comida que cumpla con los estándares alimenticios, agua potable, y que el cuidado médico sea proporcionado por profesionales".

Durante el juicio representantes de la Patrulla Fronteriza defendieron las políticas de detención de la agencia, asegurando contar con un protocolo para garantizar que los migrantes reciban el cuidado médico que necesitan después de ser detenidos.

La agencia argumentó que el alto flujo de migrantes en la frontera ha contribuido a que los centros estén llenos y los internos no sean procesados rápidamente.