El chavismo muestra músculo con una concentración masiva de seguidores

El chavismo aprovechó ves la conmemoración de los 62 años de la caída de la dictadura de Marcos Pérez Jiménez, para concentrar a miles de simpatizantes en Caracas, mientras la oposición denunció que se le impidió celebrar una sesión parlamentaria prevista en la capital venezolana.

Los chavistas marcharon poco más de tres kilómetros en el oeste caraqueño hasta el Palacio de Miraflores, desde donde despacha Nicolás Maduro, a quien también le expresaron respaldo esta jornada.

Lucha histórica

"Hoy estamos aquí en apoyo a la revolución bolivariana", dijo a Efe Luis Fernando Guerrero desde la concentración oficialista. El caraqueño, de 51 años, era uno de los cientos de trabajadores de la corporación estatal Bolipuertos, que abandonaron sus oficinas para respaldar a Maduro en las calles y marchar "contra el imperialismo".

Pero también para recordar que el 23 de enero de 1958 los venezolanos reivindicaron sus "ideales" democráticos al protagonizar una revuelta cívico-militar que terminó con el Gobierno de facto de Pérez Jiménez, recordado por sus violaciones de derechos humanos. "El 23 de enero es una fecha de reivindicaciones, donde el pueblo como tal salió a defender todas sus garantías", añadió Guerrero.

Maduro y sus motivos para celebrar

En Miraflores, Maduro recibió a sus simpatizantes y dijo que los opositores solo pueden "celebrar (hoy) el fracaso absoluto" del Gobierno interino que proclamó hace un año el líder opositor Juan Guaidó, a quien casi 60 países reconocen como presidente encargado de Venezuela.

"Hace un año empezó una tragedia", afirmó Maduro ante miles de simpatizantes. "Pretendieron imponerle a nuestro pueblo un golpe de Estado (...), lo único que pueden celebrar es el fracaso absoluto de su aventura golpista apoyada por Estados Unidos", añadió.

Asimismo, dijo que espera que los órganos de la Justicia venezolana estén "haciendo seguimiento de todos los llamados a sanciones e intervenciones" de los que acusa a Guaidó en su gira por Colombia y Europa y que sean tomadas decisiones en consecuencia.

Maduro también recordó que este año habrá elecciones para renovar el Parlamento, por lo que reiteró su invitación a la ONU para que designe una misión de acompañamiento de estos comicios. "Venezuela quiere que la ONU nombre acompañantes electorales", dijo al extender la invitación, de igual forma, a los Gobiernos de México, Argentina y Panamá, así como a la Unión Europea.

Los opositores se quejan

A inicios de semana la oposición que se aglutina bajo la figura de Guaidó, anunció más de 100 movilizaciones en todo el país y la celebración de una sesión especial del Parlamento, donde tiene contundente mayoría, para conmemorar la caída de la dictadura.

Pero pasadas las 15.00 horas locales no había informes de marchas opositoras ni siquiera en el este de Caracas, considerado un bastión de los detractores de Maduro. El antichavismo tampoco pudo celebrar la sesión especial del Parlamento en el oeste caraqueño, donde ha ganado fuerza en los últimos años.

"Impidieron la realización de actividades utilizando a los colectivos terroristas, utilizando a la (Fuerza de Acciones Especiales de la Policía) FAES, que es una especie de guardia pretoriana del dictador Maduro", dijo a periodistas Juan Pablo Guanipa, primer vicepresidente de la directiva del Parlamento que reconoce la oposición.

Efe constató que en la vía a la zona caraqueña de El Paraíso, donde los diputados opositores celebrarían la sesión especial, había fuerte presencia de la Policía Nacional Bolivariana (PNB) y varias decenas de motoristas simpatizantes de Maduro. Los opositores expresaron su sospecha de que estos últimos formaban parte de los llamados "colectivos", a los que organizaciones de derechos humanos consideran paramilitares.

"El terrorismo se ha metido en el Estado venezolano", agregó Guanipa antes de asegurar que grupos como Hizbulá, Al Qaeda o Daesh "están de alguna manera directa vinculados con Nicolás Maduro y su dictadura".

A la espera de Guaidó

Guanipa también dijo que Guaidó, que actualmente realiza una gira por Europa para recabar apoyos, volverá a Venezuela "en los próximos días" para volver a sus funciones de jefe de la Cámara, como le reconoce la oposición.

Este jueves Guaidó cumple un año de haber proclamado ante miles de simpatizantes un Gobierno interino que reconocen medio centenar de países, con Estados Unidos a la cabeza. La Fiscalía venezolana abrió varias investigaciones contra Juan Guaidó, una de ellas por haber proclamado el Gobierno encargado.

Como consecuencia congeló sus cuentas y bienes y le prohibió salir del país, aunque Guaidó ya burló esta última medida en febrero pasado cuando viajó a Colombia para liderar el fallido intento de introducir ayuda humanitaria desde Cúcuta.