CRISIS POLÍTICA EN ORIENTE PRÓXIMO

Líbano pospone el nombramiento del primer ministro y alarga la parálisis institucional

El presidente Aoun aplaza las consultas hasta el 19 de diciembre mientras crece la tensión en las calles

Michel Aoun, presidente de Líbano.

Michel Aoun, presidente de Líbano. / periodico

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El presidente del Líbano, Michel Aoun, pospuso este lunes de nuevo las consultas para elegir al nuevo primer ministro después de que el anterior, Saad Hariri, dimitiera en octubre por las protestas y en un momento en el que la comunidad internacional exige un Gobierno para ayudar en la profunda crisis que atraviesa.

"El presidente Aoun respondió a la petición del primer ministro Hariri de posponer las consultas parlamentarias hasta el jueves 19 para consultas adicionales con el fin de formar un Gobierno", dijo la presidencia libanesa en su cuenta oficial de Twitter.

Esta es la cuarta vez, desde la dimisión de Hariri, que el presidente pospone el nombramiento de un primer ministro, que debe ser musulmán suní, según el sistema confesional que rige en el país mediterráneo desde el final de la guerra civil libanesa (1975-1990).

Presión de la sociedad civil

Hariri dimitió el pasado 29 de octubre presionado por el movimiento civil que se vive desde el 17 de ese mes en contra de la corrupción del Gobierno y de toda la clase política, en unas protestas que continúan hasta ahora.

Durante este fin de semana se han sucedido violentas protestas en unas movilizaciones generalmente pacíficas en las que los manifestantes han coreado en contra de la vuelta de Hariri al puesto, tal y como se ha barajado en estos últimos días.

La elección del primer ministro y la formación del Gobierno es la primera condición impuesta por la comunidad internacional y la ONU para ayudar al país en la profunda crisis económica que atraviesa, lo que ha convertido al Líbano en uno de los países más endeudados del mundo, pues acumula una deuda de 86.000 millones de dólares, alrededor del 150 % del PIB.

Grandes dificultades

El líder del grupo chií libanés Hizbulá, Hasan Nasralá, aseguró el pasado viernes en un discurso televisado que la formación del Gobierno "no iba a ser fácil" e indicó que, aunque apoya a Hariri, no está de acuerdo con las condiciones fijadas para el nuevo gabinete.

Hariri busca un gobierno de tecnócratas, mientras que las demás principales corrientes políticas quieren que se componga de políticos y expertos en las mismas proporciones, tal y como expresó Aoun.

El coordinador de la ONU en Líbano, Jan Kubis, ha insistido durante los últimos días en la formación "urgente" de un "competente e inclusivo Gobierno, además de apoyado por el pueblo". El pasado 11 de diciembre, miembros del Grupo de Apoyo Internacional para el Líbano, auspiciado por Francia y la ONU, se reunieron en París y fijaron una hoja de ruta de apoyo para el país mediterráneo, pero que tenía pasar primero por la formación "lo más pronto posible" del Gobierno.

Ese grupo está formado por China, Egipto, Alemania, Italia, Kuwait, Rusia, Emiratos Árabes Unidos, Reino Unido y Estados Unidos, así como entidades europeas y de la Liga Árabe, entre otros.

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