LA ACTUALIDAD POLÍTICA ALEMANA

El SPD ratifica a su nueva presidencia izquierdista y debate si salir del gobierno

La socialdemocracia alemana busca una salida a su crisis de identidad tras celebrar su congreso

Norbert Walter-Borjans y Saskia Esken, tras ser ratificados al frente del SPD.

Norbert Walter-Borjans y Saskia Esken, tras ser ratificados al frente del SPD. / periodico

Andreu Jerez

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

El Partido Socialdemócrata de Alemania (SPD) inauguró este viernes un nuevo tiempo en su centenaria historia. Los 600 delegados reunidos en un congreso en Berlín confirmaron como presidentes del partido a Saskia Esken y Norbert Walter-Borjans, el dúo que conformó la candidatura del ala izquierda de la formación y que ganó el pasado sábado las primarias socialdemócratas. Se trata de la primera presidencia bicéfala de la historia de la formación, que se suma así a la práctica de otros partidos alemanes como Los Verdes o La Izquierda.

Los dos perfectos desconocidos, que se impusieron al (todavía) ministro de finanzas y vicecanciller federal, Olaf Scholz, fueron ratificados con holgura: Walter-Borjans recibió casi el 90% de los votos y Esken, rondó el 78%. La gran mayoría de los delegados se levantaron y aplaudieron a los nuevos presidentes, que se enfrentan ahora a la ingente tarea de sacar al SPD de la crisis de identidad que arrastra desde hace años y que amenaza con convertirlo en un partido irrelevante. Actualmente, se mueve entre el 13% y el 15% en las encuestas de intención de voto.

En el congreso de tres días que celebra en la capital alemana, el SPD no solo define su nueva cúpula, sino también el rumbo que quiere tomar. El partido se debate entre abandonar la gran coalición con los conservadores y buscar un perfil más izquierdista en la oposición, o permanecer en el gobierno hasta el final de la legislatura, asumir responsabilidad e intentar darle un acento social a la política económica de ejecutivo federal.

Sangría de votos

Los delegados rechazaron este viernes un abandono inmediato de la Gran Coalición. Ahora les queda definir cuáles serán las demandas socialdemócratas a su socio de gobierno. El aumento del salario mínimo, el aumento del gasto público para infraestructuras y unos objetivos más ambiciosos en la lucha contra el calentamiento global apuntan como los grandes objetivos de la nueva dirección del ala izquierda en la renegociación del pacto de gobierno.

“El SPD tiene que volver a ser el partido de la justicia social”, dijo Walter-Borjans. Y aseguró que le da una “oportunidad real” a la Gran Coalición para su mantenimiento. “Soy y sigo siendo escéptica en lo que respeta el futuro de la gran coalición”, añadió Esken. Ambos basaron su campaña para las primarias en duras críticas al gobierno con los conservadores.

El SPD ha gobernado con Merkel tres de las cuatro últimas legislaturas, al tiempo que sufría una sangría de votos. En las últimas elecciones federales de 2017, los socialdemócratas obtuvieron poco más del 20 por ciento de los votos, su peor resultado desde la fundación de la República Federal en 1949.