El presidente iraní exige que se levanten las sanciones para reunirse con Trump

El presidente iraní, Hasan Rohaní, ha afirmado este martes que Irán no dialogará con Estados Unidos hasta que todas las sanciones que le impuso Washington se levanten.

El mandatario iraní ha hecho estas declaraciones un día después de que su homólogo estadounidense, Donald Trump, dijera que quiere reunirse con él para intentar rebajar la tensión que ha aumentado en el último año y medio entre los dos países.

Trump señaló este lunes, en el marco de la cumbre del G7 en Biarritz (Francia), que "si se crean las circunstancias justas", estaría dispuesto a mantener un encuentro para acabar con el enfrentamiento entre su país e Irán a raíz de la retirada de Washington, en el 2018, del pacto sobre el programa nuclear iraní firmado en el 2015 por EEUU, Francia, Gran Bretaña, Alemania, Rusia y China con el régimen de los ayatolás.

"Es realista una reunión en las próximas semanas con el presidente iraní (Hasan) Rohaní", afirmó Trump. "Pero "entretanto deben jugar bien sus cartas y no pueden hacer lo que dijeron querer hacer, en caso contrario habrá una reacción más bien violenta", matizó.

Después, el presidente francés, Emmanuel Macron, aseguró que se habían "creado las condiciones para una reunión" entre Trump y Rohaní en las próximas semanas.

"Sanciones ilegales"

Pero las palabras de Trump no han convencido a Rohaní. "Primero, EEUU tendría que actuar levantando las sanciones ilegales, injustas y parciales que impuso a Irán", ha subrayado hoy el presidente iraní en un discurso televisado.

"La clave para que se produzcan desarrollos positivos en las relaciones de los dos países está en manos de Washington", ha dicho Rohaní, y ha llamado al "arrepentimiento" de EEUU por sus sanciones contra Irán.

Para Rohaní, la situación solo se desbloqueará si EEUU da "el primer paso" y "vuelve a los compromisos" que adquirió en el acuerdo nuclear. Si Washington reconsidera su actitud, Irán hará lo mismo.

Trump decidió imponer sanciones económicas de nuevo a Irán el año pasado tras retirarse unilateralmente del pacto nuclear. Debido a este castigo y al fracaso del resto de países signatarios en contrarrestarlo, Teherán ha dejado de cumplir, desde hace varios meses, algunos de los compromisos que adquirió en el acuerdo.

Irán superó en julio el límite de almacenamiento de uranio y su nivel de enriquecimiento, y tiene previsto dar nuevos pasos en esta línea a principios de septiembre si no le garantizan sus exportaciones petroleras.

Reducción de compromisos

"Seguiremos reduciendo nuestros compromisos del pacto del 2015 si no se garantizan nuestros derechos (...) Teherán nunca ha querido armas nucleares", ha aseverado Rohaní, que el mes que viene asistirá a la Asamblea General de la ONU en Nueva York, como Trump.

El presidente iraní ha hecho hincapié en que si se reúne con su homólogo estadounidense no puede ser para "hacerse simplemente una foto".

La desconfianza de Irán no se ha manifestado solo en palabras de Rohaní. El ministro de Exteriores del país, Mohamad Yavad Zarif, ha calificado de "inimaginable" la posible reunión entre Trump y el presidente iraní hasta que Washington cumpla con los compromisos del acuerdo nuclear. Zarif ha explicado que intentó buscar fórmulas para salvar el pacto en su visita a la cumbre del G7. 

Su paso por Biarritz y las declaraciones de Trump y Macron han encendido las alarmas en Israel, donde el gobierno de Binyamin Netanyahu estaba muy satisfecho por la política de confrontación de EEUU con Irán.

Según el diario israelí 'Haaretz', los temores de Israel, expresados en conversaciones off the record con representantes gubernamentales, son que Trump acabe firmando un nuevo pacto nuclear con Irán que dé más ventajas a Teherán que el anterior.