EN BAYONA

Críticas en Francia por la presencia de dos ministros en una corrida de toros

Corrida de José Tomás en Nimes (Francia).

Corrida de José Tomás en Nimes (Francia). / periodico

Irene Casado Sánchez

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“Indecencia”, “vergüenza”, “asco”. Con estos epítetos los defensores de los derechos de los animales incendian las redes sociales, tras la difusión de una foto de Didier Guillaume, ministro francés de Agricultura, y Jacqueline Gourault, responsable de la cartera de Cohesión de Territorios, en el tendido de la plaza de toros de Bayona.

Lejos de pasar inadvertida, la imagen de ambos invitados excepcionales a la tradicional corrida goyesca celebrada el pasado miércoles 14 de agosto en la región vasca se ha propagado como la pólvora levantando una ola de críticas, no solo entre los simpatizantes de la causa animalista, también entre diputados ecologistas.

“Lamentable […] el ministro encargado del bienestar animal asiste a una corrida”, escribió Yannick Jadot, eurodiputado de Europa Ecología-Los Verdes (EELV), en su cuenta de Twitter. En la misma línea, interrogado este viernes 16 de agosto por BFMTV, Julien Bayou, portavoz de la formación ecologista, aseveró con cierta frustración que “uno no puede pretender ser ecologista cuando no se preocupa por los seres vivos […] en este caso, se trata de un apoyo claro y neto a una masacre”.

Más allá de las diatribas y críticas, la presencia de Didier Guillaume y Jacqueline Gourault en el festejo taurino plantea ciertas cuestiones éticas: “¿Es el lugar de los ministros de un Gobierno que promueve un ‘nuevo mundo’ y que pretende ser ecologista, la primera fila de la tribuna de un acto de tortura como la corrida”, se interrogó Pierre Minnaert, miembro del Consejo Federal y delegado del Partido Verde Europeo, en Twitter, antes de añadir que entre “las atribuciones del ministro de Agricultura figura el bienestar animal”.

Legal solo en el sur de Francia

Frente a las críticas, la facción protaurina no tardó en reaccionar. La tauromaquia “es una pasión del Sur que no queremos exportar […] el Sur tiene sus peculiaridades y tiene la intención de mantenerlas el mayor tiempo posible”, defendió Olivier Baratchart, director de las arenas de Bayona, en la radio RTL. Una de estas peculiaridades consiste concretamente en contar con la venia legal que permite organizar espectáculos taurinos. El españolísimo festejo, exportado a Francia en 1852, solo es legal en ciertas regiones del suroeste y sureste del país,  donde la tauromaquia se reconoce como una tradición. 

Para Olivier Baratchart, la polémica despertada por la presencia de dos ministros en sus tendidos no tiene razón de ser: “Son gente que pasan sus vacaciones en la costa vasca y que se toman la libertad de disfrutar, como cualquier otra persona, del ocio que deseen […] Los responsables políticos son siempre bienvenidos cuando quieren honrar con su presencia nuestras arenas durante una corrida de toros, que por cierto fue excepcional y todos se dieron un festín. No veo ninguna controversia en todo esto”, zanjó el responsable de la plaza.

Toros bravos

Mientras las asociaciones anticorridas denuncian el maltrato animal y un acto de crueldad injustificable exigiendo la abolición de las novilladas, los aficionados recurren a la protección de la raza del toro de lidia para justificar el festejo y la presencia del ministro de Agricultura. “Didier Guillaume sabe perfectamente que, al venir a una corrida de toros, salva una raza, la raza de toro bravo, que es única, inútil, que desaparecería del reino animal, si no hubiera más corridas […] En el fondo, podemos decir que vinieron a defender una raza, lo que entra en el marco de sus competencias”, justificó Olivier Baratchart.

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