Servidor del Pueblo, la formación que jubila a toda una generación política en Kiev

Hace un año y medio, El Servidor del Pueblo, el partido fundado por el flamante presidente Volodimir Zelenski, ni siquiera aparecía en el registro del Ministerio de Justicia de Ucrania. Su primer congreso se celebró a toda prisa hace poco más de un mes, cuando las legislativas ya habían sido convocadas y el tiempo apremiaba.

Nadie duda en Kiev de que el proceso de gestación de la fuerza política que gobernará el país durante la próxima legislatura ha avanzado a trompicones, y con un punto de improvisación. En su empeño de romper con el pasado reciente del país, el jefe del Estado lanzó a finales de mayo un atrevido y poco ortodoxo planteamiento para cumplimentar las listas de candidatos a diputados: los aspirantes podían enviar sus solicitudes a través de la web del partido, junto con su currículo y sus propuestas legislativas.           

Se descartaba a cualquiera que hubiera ejercido previamente de diputado y en ningún caso se exigía como condición 'sine qua non' tener experiencia política previa. A los aspirantes, eso sí, se les demandaba tener un alto "sentido de la moral y fuertes principios", según declaró el líder de la formación, Dmytro Razumkov. Y para comprobarlo, no se descartaba siquiera el recurso a detectores de mentiras. 

Exhaustivos controles

Pero ni los más exhaustivos controles pueden garantizar la honorabilidad de todos y cada uno de los candidatos presentados en tan corto periodo de tiempo, según ha tenido que admitir el propio presidente Zelenski, en el momento de desvelar los integrantes de las listas, hace apenas unas semanas. "No hemos tenido tiempo suficiente para analizar su integridad, por eso esperamos que los periodistas y la sociedad civil nos ayude a corregir los errores en los que hayamos podido incurrir", demandó.

Deportistas renombrados, gestores en empresas de medios de comunicación, activistas anticorrupción y en favor de los derechos humanos y profesores universitarios con una edad media que no supera los 40 años forman el grueso de los integrantes en las listas de El Servidor del Pueblo en estas elecciones. Los sondeos de opinión prevén que hasta el 70% de los escaños en la Rada (Parlamento unilateral) cambiará de manos tras estas elecciones, lo que de hecho supone la jubilación de una parte importante de la clase política que ha gobernado el país desde la revolución de Maidán. 

Además de proclamarse "proeuropeo", "liberal" y "favorable" a la "inversión extranjera", la lucha contra la corrupción ocupa un lugar destacado en todas las propuestas políticas de El Servidor del Pueblo. Un mecanismo para destituir a los parlamentarios que hayan perdido la confianza de los votantes será instituido. Impulsará políticas favorables al idioma ucraniano, aunque "sin imposiciones", en un país donde el ruso sigue siendo un idioma de uso común.