SESIÓN EN LA EUROCÁMARA

Tusk insiste en una prórroga larga del 'brexit'

El presidente del Consejo Europeo, Donald Tusk, en la Eurocámara.

El presidente del Consejo Europeo, Donald Tusk, en la Eurocámara. / periodico

Silvia Martínez

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El presidente del Consejo Europeo, Donald Tusk, fue el primero en sugerir públicamente hace unas semanas un aplazamiento largo del 'brexit'Su postura desde entonces no ha cambiado y aunque la primera ministra británica, Theresa May, optó la semana pasada por solicitar una prórroga corta, el polaco no desespera y sigue preparando el terreno para una alternativa que tampoco está libre de polémica y resistencias en la Eurocámara. 

“Hubo voces diciendo que esto dañaría o sería un inconveniente para ustedes. Déjenme ser claro: ese tipo de pensamiento es inaceptable. No se puede traicionar a seis millones de personas que han firmado la petición de revocar el artículo 50, al millón de personas que se manifestaron pidiendo un segundo referéndum o la cada vez más gente que quiere seguir en la Unión Europea”, ha avisado este miércoles durante un debate en el pleno del Parlamento Europeo.

Según Tusk, aunque todos esos británicos que han salido a las calles y han firmado una petición pueden sentir que no están suficientemente representados en el Parlamento del Reino Unido deben sentir que sí lo están “en esta Cámara porque son europeos”, ha reivindicado durante una sesión de balance en la que su homólogo en la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker, ha optado por echar mano de la ironía para referirse a la incertidumbre que sigue rodeando al 'brexit' y al caos político presente en Westminster a solo dos días de la fecha en la que supuestamente debía producirse el brexit (29 de marzo). 

“Si comparase al Reino Unido con una esfinge, la esfinge me parece un libro abierto. Veremos cómo se pronuncia este libro a lo largo de la semana”, ha indicado durante una intervención en la que ha optado por limitar sus comentarios sobre un asunto más difícil que la última discusión sobre China que, según ha dicho, fue “mucho menos complicado”.

El 12 de abril, fecha límite

En la última cumbre, los 27 ofrecieron a May una aplazamiento de algunas semanas. Hasta el 12 de abril si la Cámara de los comunes tumba esta semana, por tercera vez, el acuerdo de divorcio. O, hasta el 22 de mayo, un día antes del inicio de las próximas elecciones europeas, si la primera ministra británica consigue el aval  al acuerdo de divorcio negociado de la UE. 

Esos son los nuevos plazos que Londres tiene sobre la mesa y “el 12 de abril es la nueva fecha precipicio", ha subrayado. Antes de ese día, "Reino Unido puede elegir entre el acuerdo de retirada, un brexit sin acuerdo, una prórroga larga o revocar el artículo 50”, ha vuelto a recordar Tusk. “Todo es posible hasta el 11 de abril”, ha subrayado también el negociador jefe de la UE, Michel Barnier, en el turno de réplica del debate. De momento, los líderes europeos se plantean ya celebrar una nueva cumbre europea en el mes de abril, según ha confirmado Tusk.

Más allá de esa fecha será el abismo y es que, de seguir formando parte de la UE después del 22 de mayo, Reino Unido tendría que celebrar elecciones europeas para evitar la incertidumbre jurídica que generaría seguir siendo miembro del club sin tener representación institucional en la Eurocámara, algo que preocupa a gobiernos y políticos porque podrían llegar a bloquear el funcionamiento de las instituciones. 

Contraataque de los euroescépticos

“¿De verdad quieren que vuelva a este escaño?, ha preguntado durante su turno de intervención el euroescéptico británico, Nigel Farage. "Rechacen la prórroga más allá del 12 de abril y sigamos con nuestras vidas", ha reclamado arremetiendo contra un acuerdo de divorcio “malo” y contra Theresa May. “No tiene la valentía para cumplir con sus promesas y sacarnos de la UE este viernes. Asistimos a la traición a una votación democrática”, ha criticado. Más duro todavía ha sido el ataque del euroescéptico británico Gerard Batten que ha calificado de “humillación” el acuerdo y de traidor el Ejecutivo de May. “Los británicos han sido gobernados por un grupo de traidores. Es una rendición incondicional”, ha lamentado.

No todos en el Reino Unido están de acuerdo con el divorcio y el representante del Partido Nacionalista Escocés (SNP), Alyn Smith, se ha encargado de recordar que los escoceses, todos salvo los conservadores, piensan que "el mejor brexit es que no haya brexit" y que si el "si nos sacan de la familia de naciones contra nuestra voluntad, democráticamente expresada, la independencia será la única vía que tengamos para volver a Europa". Así que, ha proseguido, "mantengan una luz encendida para que volvamos a Europa".