El Tribunal de la ONU eleva la condena a Karadzic a cadena perpetua

El Tribunal de la ONU ha elevado a cadena perpetua la pena impuesta al líder serbobosnio Radovan Karadzic, por su responsabilidad en el genocidio de Srebrenica en 1995 durante la guerra de Bosnia. El tribunal, en trámite de apelación, considera que la condena inicial de 40 años de cárcel es demasiado suave dada la gravedad de los crímenes cometidos.

Karadzic había sido condenado a 40 años de cárcel por el Tribunal Penal Internacional para la Antigua Yugoslavia (TPIY), pero tanto la Fiscalía como sus abogados habían apelado la sentencia en primera instancia.

"Karadzic ha ofrecido una interpretación alternativa de los hechos, pero ha errado a la hora de demostrar errores del tribunal de primera instancia", ha dicho el juez presidente.

Gravedad

Los magistrados han confirmado la culpabilidad de Karadzic por el genocidio de Srebrenica, cinco crímenes de lesa humanidad -persecución, exterminio, asesinato, deportación y actos inhumanos- y cuatro crímenes de guerra -asesinato, terror, ataques ilegales a civiles y toma de rehenes-.

La sentencia considera que la Fiscalía no fue capaz de probar un cargo adicional de genocidio por los asesinatos en algunos municipios de Bosnia-Herzegovina, pero consideró que la sentencia en primera instancia de 40 años de cárcel "no era razonable" debido a la gravedad de los crímenes.

El veredicto ha sido recibido con alegría por familiares de víctimas, que horas antes la lectura de la sentencia colocaron fotografías de sus seres queridos delante del tribunal, mientras que Karadzic se mostró inmutable en todo momento.

Sin violencia

El exlíder serbobosnio ha pedido por medio de su abogado, Peter Robinson, que sus seguidores "no reaccionen con violencia" a la condena. "Karadzic dijo que la política se ha impuesto a la justicia y considera que la sentencia ha blanqueado un juicio injusto", ha expuesto el letrado, que compareció ante los medios entre los gritos en su contra de algunas madres de Srebrenica que asistieron a la lectura del veredicto.

El proceso legal de diez años "confirma que no había justicia posible", añadió el abogado, quien describió la reacción de su cliente como "algo resignada", aunque añadió que "se esperaba la sentencia". "Él dijo que el precio de una república de Srpska independiente [ente territorial serbio en Bosnia-Herzegovina, la cual Karadzic presidía durante la guerra] es perder su libertad, pero está preparado para asumir ese coste", añadió el letrado.

La cadena perpetua impuesta hoy es inapelable, pero Robinson dijo que Karadzic "está determinado a hacer todo lo posible para darle la vuelta al veredicto". La única opción legal que le queda a Karadzic es "presentar nuevos hechos que permitan revisar la decisión", dijo Robinson, aunque reconoció que es una alternativa "que pocas veces se ha dado".