Rotura de represa

Desechos de la minera Vale contaminan el río Paraopeba en Brasil

Al menos 305 kilómetros del caudal presentan una calidad del agua "pésima" o "ruin", según un análisis realizado por una oenegé

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El Periódico

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Como parte de la tragedia que dejó a su paso la rotura de una represa de la minera Vale el pasado enero, los desechos contaminaron al menos 305 kilómetros del río Paraopeba, en el sudeste de Brasil, según un informe de una ONG sobre los impactos medioambientales de esta situación, que ha dejado 166 muertos y 155 desaparecidos.

El resultado fue obtenido por un equipo de la Fundación SOS Mata Atlántica, que efectuó análisis sobre la calidad del agua en 22 puntos diferentes del río, que tiene una extensión total de unos 510 kilómetros y baña el estado brasileño de Minas Gerais. La expedición duró diez días, en los que recorrieron más de 2.000 kilómetros de carreteras próximas al cauce de la corriente fluvial, cuya calidad del agua a lo largo de 305 kilómetros es "pésima" o "ruin".

"El resultado fue estremecedor. En todos los trechos analizados, el equipo no encontró agua en condiciones de uso", según el informe. En la última muestra obtenida, SOS Mata Atlántica constató que el nivel de turbidez era tres veces mayor del permitido en la legislación brasileña.

Derrumbe de la represa

El derrumbe de la represa minera propiedad de la poderosa compañía Vale ocurrió el 25 de enero en la ciudad de Brumadinho, en Minas Gerais, y ha ocasionado 166 muertos y 155 desaparecidos, según el último recuento de Defensa Civil y el Cuerpo de Bomberos, que continúan con las labores de rescate.

Construido en 1976, el dique de contención tenía capacidad para almacenar cerca de 13 millones de metros cúbicos de residuos ferrosos y agua, que arrasaron con el área administrativa de Vale, casas, granjas, posadas y carreteras en pocos minutos y con una fuerza descomunal. Vale informó que también está vigilando la calidad del agua en 48 puntos y se comprometió a tomar todas las medidas posibles para garantizar el abastecimiento tanto para consumo humano como para actividades agropecuarias.

De acuerdo con otro cálculo divulgado con anterioridad por la organización WWF, la ola de lodo destruyó solo en el primer día de la tragedia al menos 125 hectáreas de bosque, equivalentes a un millón de metros cuadrados o 125 campos de fútbol. El presidente de Vale, Fábio Schvartsman, afirmó en una comisión parlamentaria que la compañía es una joya para Brasil y "no puede ser condenada" por la rotura de la represa en Brumadinho.