Sube la tensión militar entre China y EEUU la víspera de la reunión presidencial
Pekín eleva la alerta ante la proliferación de buques de guerra estadounidenses en el mar del Sur de China y el estrecho de Taiwán
Adrián Foncillas
Periodista
Adrián Foncillas
Pekín ha elevado la alerta ante la febril actividad de buques de guerra estadounidenses en su patio trasero. Washington ha incrementado su presencia en el mar del Sur de China y en el estrecho de Taiwán en vísperas de la reunión que mantendrán los presidentes Xi Jinping y Donald Trump este fin de semana en Buenos Aires, en el marco de la cumbre del G-20. Las últimas provocaciones se entienden por la agresiva lógica negociadora de Trump.
El Ministerio de Defensa chino ha prometido que el Ejército protegerá "la integridad territorial y la soberanía de China". La primera reunión presidencial en Florida atemperó los ánimos y Trump se abstuvo durante un año de enviar sus barcos a las aguas taiwanesas. Ese clima ha quedado arruinado y las maniobras del destructor Stockdale, dotado de misiles guiados, son la tercera incursión de barcos estadounidenses en la zona desde julio. Trump sigue castigando a China en el flanco taiwanés, el más sensible porque afecta a su sagrada soberanía nacional.
China ha recordado esta semana a Washington que no existe mayor amenaza para las relaciones bilaterales que su tozudez en alinearse con la isla rebelde. Xi informó el mes pasado al Ejército que debía "prepararse para la guerra" y el ministro de Defensa, Wei Fenghe, prometió que Pekín no entregará "ni una sola pulgada de su territorio".
Fricciones
También en el mar del Sur de China ha presionado esta semana Washington. El buque Chancellorsville ha navegado entre las islas Paracelso que China entiende suyas. La Marina estadounidense ha explicado las maniobras como respuesta "a las excesivas reclamaciones marítimas" de Pekín.
Estados Unidos defiende esas maniobras como ejercicios de "libertad de navegación". Consisten en pasear periódicamente sus buques y aviones de guerra frente a las islas con el indisimulable fin de descomponer a Pekín, que denuncia las violaciones en su exclusión marítima legal. Esos juegos de guerra han estado a punto de provocar serios accidentes. Dos barcos rozaron el accidente en alta mar en octubre cuando el chino se acercó a apenas un centenar de metros del estadounidense en una maniobra que Washington calificó de "agresiva y poco profesional".
La fragorosa guerra comercial que Trump declaró a China ha contagiado la belicosidad a asuntos geoestratégicos como Taiwán o la reclamaciones territoriales en el mar del Sur de China. Los expertos juzgan la reunión presidencial de este fin de semana en la cumbre del G-20 como clave para rebajar las tensiones entre las dos superpotencias. De ahí saldrá un alto el fuego comercial o un agravamiento del cuadro de consecuencias imprevisibles.
- Una intensa granizada impacta en Barcelona y el litoral catalán
- El SMS que Hacienda está enviando a todos los que han hecho esto en su declaración de la renta
- Sumergir los pies en vinagre, la nueva tendencia que arrasa: estos son sus beneficios
- Catalunya rechaza el reparto de menores no acompañados llegados a Canarias que propone el Gobierno
- Encuesta elecciones Catalunya: El PSC se afianza en cabeza y Junts toma la delantera en su pulso con ERC
- Saltan las alarmas por el estado de salud de uno de los Mozos de Arousa
- Una familia recupera la titularidad de un piso de Girona tras varios intentos de desahucio
- Un luchador iraní es golpeado por el público y suspendido de por vida tras pegar una patada a una chica en el ring