Sánchez: Con el 'brexit' perdemos todos pero respecto a Gibraltar gana España

Pedro Sánchez en rueda de prensa tras el Consejo.

Pedro Sánchez en rueda de prensa tras el Consejo. / periodico

Silvia Martinez / Bruselas

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

El presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, comparte la tristeza del resto de estados miembros por la decisión del Reino Unido de abandonar la Unión Europea pero también insiste en que el acuerdo aprobado es el mejor posible dadas las circunstancias, porque garantiza los derechos de los ciudadanos, da certeza económica y, sobre todo, sitúa a España en "una posición de fortaleza" como nunca antes lo había estado en relación a la negociación futura con el Reino Unido sobre Gibraltar.

"Con la salida del Reino Unido perdemos todos, sobre todo el Reino Unido, pero en relación a Gibraltar, España gana y gana Europa", ha resumido Sánchez, que considera que "hay un antes y un después" y que tras el acuerdo del 'brexit' "España cuenta con más garantías". Eso es, según el jefe del Ejecutivo, gracias "al triple blindaje" para garantizar que el acuerdo futuro entre el Reino Unido y la UE que se aplique al Peñón exigirá el visto bueno de España.

Se trata de cuatro textos -una carta firmada por el presidente del Consejo Europeo y de la Comisión Europea, dos declaraciones del Consejo Europeo (en nombre de los 27) y de la Comisión así como una carta del embajador británico ante la UE- que según el presidente español ofrecen una "base jurídica" además de política. Para Sánchez, los documentos ponen de de manifiesto que "la Unión Europea reconoce el liderazgo de España" en la negociación sobre el Peñón" y "asume la posición política del Gobierno de España" respecto a este contencioso.

Malestar entre los diplomáticos

En realidad, el Gobierno español no ha conseguido sus objetivos iniciales: ni se ha modificado el polémico artículo 184 del Tratado de salida del Reino Unido –sobre la relación futura y que no menciona a Gibraltar- ni la declaración política sobre la futura relación. Sin embargo, Sánchez se da por satisfecho con un paquete que considera equivalente y que obtuvo 'in extremis' este sábado, tras una amenaza de veto que no ha gustado demasiado entre los diplomáticos europeos que han negociado el acuerdo y que no entienden que surgiera en el último momento sin ninguna justificación basada en hechos.

"Espero que no se lo hayan puesto más difícil a Theresa May en el Parlamento porque ya lo tiene difícil. Si esto desequilibra la balanza sería muy desafortunado", alertan las mismas fuentes que señalan que los textos aprobados tienen un evidente poso político pero ningún peso jurídico. "Es como constatar que todas las mañanas sale el sol. Las declaraciones son eso, declaraciones políticas sin valor jurídico. Es reflejar lo que hay en el Tratado", aseguran sobre las dos declaraciones añadidas a las actas de la reunión que constatan lo que ya estaba, que España tendrá derecho en el futuro acuerdo comercial.

En todo caso, el compromiso político, que ya estaba en las directrices de negociación aprobadas en abril de 2017, es indudable. Y lo ha dejado claro el propio presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker, en rueda de prensa. "Los que no son españoles no miden la importancia de este asunto para el Reino de España. He hablado mucho con el primer ministro y el rey (Felipe VI) estoy últimos días y quiero decir aquí que el acuerdo que hemos obtenido es un acuerdo que es bueno para España", ha valorado para añadir acto seguido en español que "nuestro cariño y solidaridad están con España".

¿Y el debate de la cosoberanía?

¿Ha llegado el momento de plantear el debate de la cosoberanía?, le han preguntado al presidente del Gobierno. "No creo que debamos adelantar ningún escenario. La voluntad del Gobierno en esta fase era pertrecharse de todas las garantías, con todos los instrumentos, para abordar la relación futura" porque "ahora empieza el momento más complejo y difícil". Así, ha  señalado que la UE ha dado a España "una posición de fortaleza que no había tenido nunca" para hablar en el futuro "de todo" con el Reino Unido. 

Sánchez ha aclarado que "el planteamiento del gobierno de España es resolver de una vez por todas un conflicto que lleva más de 300 años existiendo”, ha valorado. Su colega británica no comparte su visión. "Estamos orgullosos de que Gibraltar sea británico y el estatus constitucional de Gibraltar no cambiará", ha avisado la primera ministra tras la cumbre.