Un nuevo grupo de migrantes hondureños atraviesa Guatemala rumbo a los EEUU

Una nueva caravana de migrantes hondureños ha comenzado su recorrido siempre mirando hacia el norte, donde unas 1.500 personas han puesto sus esperanzas para comenzar una nueva vida y de acuerdo con la Procuraduría de Derechos Humanos de Guatemala, ya atraviesna el territorio guatemalteco.

El grupo, entre el que sigue habiendo niños, se dirige hacia la cabecera departamental de Zacapa, donde pasarán la noche antes de continuar su travesía para poder llegar a Estados Unidos, como intentan miles de sus compatriotas que ahora están en México. Durante el camino, la Policía Nacional Civil de Guatemala está realizando retenes y los toman de los vehículos donde estén montados, como camiones o tráileres.

Extorsiones y cobros indebidos

El director de la Casa del Migrante, el padre italiano Mauro Verzeletti, denunció que las autoridades mantienen los retenes "sin atención y deshidratados a los migrantes, sobre todo a los niños", quienes junto a sus padres y demás personas de las caravanas llegan al albergue "hechos trizas" para ser atendidos por los médicos.

Afirmó que los agentes de la Policía Nacional de Guatemala están "extorsionando" a los migrantes, a quienes "les cobran en cada retén 100 quetzales (cerca de 13 dólares)" y que si hay tres retenes, entonces "son tres pagos los que suelen hacer las personas".

La nueva caravana de migrantes, en su mayoría hondureños, llegó el pasado lunes a Chiquimula tras un diálogo con agentes de la Policía Nacional Civil, el Ejército y personal de la Coordinadora Nacional para la Reducción de Desastres, que los trataron de disuadir.

Decididos a continuar

Pero los migrantes, que habían pasado la frontera de Agua Caliente, Honduras, consiguieron eludir el retén tras dialogar con las autoridades, según indicó la titular de Comunicación Social de la Procuraduría de los Derechos Humanos de Guatemala, Lesvia Salguero.

Los migrantes siguieron la marcha por la ruta con el fin de cruzar el territorio guatemalteco (unos 250 kilómetros a lo ancho) y llegar a la frontera con México, para continuar hacia su destino: Estados Unidos. Al menos 7.000 personas, según la ONU, forman parte de la primera caravana de migrantes centroamericanos que desde el pasado 13 de octubre avanza rumbo a Estados Unidos.