La ola ultra en Brasil

Roger Waters es insultado por simpatizantes de Bolsonaro

Roger Waters, en un momento de su actuación en el Palau Sant Jordi

Roger Waters, en un momento de su actuación en el Palau Sant Jordi / periodico

Abel Gilbert

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Roger Waters, el exlíder de Pink Floyd, constató sobre un escenario de Sâo Paulo la fuerza social que sostiene a Jair Bolsonaro, el ultra que quedó a cuatro puntos de ganar la primera vuelta presidencial en Brasil, el 28 de octubre. Waters, consignó no sin cierta sorpresa 'Folha de Sâo Paulo',  fue abucheado por la mayoría del público que fue a escucharlo al Allianz Parque.

Sâo Paulo, el principal distrito económico y electoral del país, se inclinó masivamente por el capitán en reserva. Una parte del público aplaudió la decisión del bajista y compositor de presentar en las pantallas gigantes la consigna “Él no”, lanzada por el movimiento feminista brasileño contra Bolsonaro. Pero otra mayoritaria lo rechazó.

Los votantes del ultraderechista tampoco toleraron que Waters presentara sobre esa misma pantalla una lista de países “neofascistas” que comenzaba con los Estados Unidos de Donald Trump, e incluyera a Brasil junto con Polonia, Hungría y Austria. “Basura”, “hijo de puta”, “a tomar en el culo”, le gritaron, de acuerdo con 'Folha'.

“Mito, mito”, empezaron a corear. Así lo llaman al candidato del Partido Social Liberal (PSD). “Visiblemente constreñido, se quedó  cinco minutos sin saber qué hacer”, señaló el diario paulista. El exlíder de Pink Floyd reaccionó luego recordando que no es posible un político apoyara a un régimen militar. Entonces, “los abucheos y los insultos redoblaron”.

Conmoción por un asesinato

Está estallando una bomba de tiempo que nadie quiso ver”, ha señalado el filósofo Vladimir Safatle, de la Universidad de Sâo Paulo. El clima de intolerancia que atraviesa Brasil ha dejado una primera víctima en el estado de Bahía, nada menos que el compositor y maestro de capoeira Romualdo Rosário da Costa. Se le conocía como Moa do Katendê.

Falleció el domingo a los 63 años, después que un simpatizante de Bolsonaro le asestara 12 puñaladas por ser simpatizante del Partido de los Trabajadores (PT). Moa do Katendê era amigo de Caetano Veloso, uno de los grandes artistas brasileños de las últimas décadas, quien reaccionó con estupefacción. “A él le debo la revelación que fue ver y oír al grupo de personas en la calle cantando 'Misteriosamente el Badauê'”. Caetano le grabó algunas de sus canciones.

 “Fue una de las figuras centrales en la historia del crecimiento de los bloques afro de Salvador, estoy de luto por él, no miro las redes sociales, abrí Yahoo! para llegar al 'email' y vi la foto de Moa, sonriendo, que me hizo detener, medio alegre de verlo, y conocer la terrible noticia”.

Veloso fue elocuente en su advertencia: “La mente brasileña está en un estado que precisa ser superado. Hay que calmar la cabeza para resolver las cosas. No podemos retroceder a esa cosa bárbara, el asesinato de Katende es una señal de que no debemos seguir con fuerza”.