TENSIÓN EN EL ESTE DE EUROPA

Polonia pide a Trump una base militar en su territorio para frenar a Rusia

el presidente de polonia andrzel duda y el de eeuu donald trump

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Idoya Noain

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Las complejas relaciones entre Estados Unidos de Donald Trump y la Rusia de Vladimir Putin obligan al mandatario de Washington a realizar ejercicios de equilibrismo diplomático. Este martes, tras recibir en la Casa Blanca al presidente de Polonia, Andrzej Duda, Trump ha declarado que su Administración está “considerando y estudiando seriamente” la petición de Polonia para que establezca en su territorio una base permanente con fuerzas estadounidenses. Ha quedado lejos, no obstante, de definir a Rusia como una amenaza y también de hacer un compromiso firme ante la petición polaca.

Esa solicitud se conocía ya desde verano, cuando se supo que Varsovia había mostrado su disposición a pagar hasta 2.000 millones de dólares a Washington a cambio de que estableciera una base permanente en su suelo (al mismo tiempo que se publicaba que Trump había ordenado estudiar la retirada de tropas de Alemania). Este martes ha sido Duda quien ha realizado directamente la petición a Trump. Y en rueda de prensa el polaco ha defendido que la presencia militar estadounidense es necesaria por “la expansión de la actividad militar de Rusia y las violaciones al derecho internacional” de Moscú en la región. “La presencia de EEUU solo daría garantía de seguridad y posibilidad de defensa”, ha declarado Duda, que ha afirmado también que “beneficiaría a los intereses de EEUU”.

Todo un reto

Para Trump la respuesta es un reto. Pese a sus críticas a la OTAN, en los últimos meses EEUU ha incrementado su presencia en ejercicios y maniobras militares de la organización trasatlántica en el este de Europa, algo que no ha sentado bien en Moscú. Una base en Polonia solo dispararía las tensiones.

Quizá por eso Trump ha eludido contestar a la pregunta directa de si considera a Rusia una amenaza. Solo ha constatado que Moscú “ha estado actuando agresivamente”, ha afirmado que el Kremlin “respeta la fuerza” y ha señalado a la complicada relación histórica entre Rusia y Polonia. Y aunque se le ha puesto una sostenida sonrisa en la cara cuando Duda ha jugado con su ego prometiendo que la base se llamaría “Fort Trump”, ha quedado a muchos pasos de un compromiso formal.