Crisis en la iglesia católica

Continúan las investigaciones a curas y obispos por los abusos de menores en EEUU

La justicia de los EEUU continúa persiguiendo estos actos que han causado indignación y mucho dolor entre las víctimas

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Tras los escándalos de violaciones de menores por miembros de la iglesia católica en los Estados Unidos, ahora la fiscal general del Estado de Nueva York, Barbara Underwood, abrió una investigación por posibles casos de abusos sexuales en su distrito y busca determinar si estos casos fueron encubiertos por jerarcas eclesiásticos, justo después que se revelaron más de 300 crímenes cometidos por curas y obispos de Pensilvania.

De esta manera, la fiscalía emitió una orden para que ocho diócesis aporten los documentos de los que dispongan, así como información sobre los pagos realizados a posibles víctimas y el resultado de investigaciones internas. Representantes de las jurisdicciones eclesiásticas prometieron cooperar con la pesquisa. "Nuestra diócesis cooperará con cualquier investigación iniciada por la Fiscalía General", declaró George Richert, vocero de la diócesis de Buffalo.

Las citaciones fueron enviadas a la arquidiócesis de Nueva York, en la ciudad de Nueva York; así como a las diócesis de Albany, Brooklyn, Rochester, Syracuse, Buffalo, Ogdensburg y Rockville Center.

Las víctimas merecen ser escuchadas

Por otra parte, la fiscalía bajo el mando Underwood ha iniciado una investigación civil sobre la respuesta de la Iglesia a denuncias de abusos y además ha entablado contacto con fiscalías locales, que tienen la autoridad de convocar a jurados investigadores o iniciar procesos penales.

"Las víctimas en Nueva York se merecen ser escuchadas", dijo la fiscal, y añadió: "Haremos todo lo que esté en nuestra mano para que se haga justicia". La investigación de la fiscalía del Estado de Nueva York cubre todas las diócesis, así como otras entidades vinculadas a la iglesia católica, que son esencialmente instituciones sin ánimo de lucro.

En paralelo, la fiscal general trata de coordinar su acción con los fiscales de distrito por si pudiera derivarse una acción penal. Underwood no tiene autoridad para convocar a un gran jurado que investigue estas acusaciones y en consecuencia, procesar a los individuos que hayan cometido una ofensa penal, por lo que la fiscal aprovecha para pedir que el legislativo adopte un reglamento que permita proteger mejor a los menores frente a estos abusos.

Abren canales para atender denuncias

El anuncio ocurre tres semanas después de que un jurado investigador determinó que hubo abundantes casos de abusos sexuales contra menores de edad por parte de unos 300 curas en Pensilvania.

La dependencia de Underwood anunció también la creación de una línea telefónica especial (1-800-771-7755) y un sitio web (ag.ny.gov/ClergyAbuse) para denunciar, de forma anónima, casos de curas pederastas.

"El informe del jurado investigador en Pensilvania reveló actos perturbadores y depravados por parte del clero católico, tapados por una cultura del secreto y la complicidad", dijo Underwood en un comunicado.