La inteligencia alemana vigila a la extrema derecha de AfD

Al menos dos estados federales han calificado al partido xenófobo como una amenaza para la Constitución

Manifestantes del partido de extrema derecha Alternativa para Alemania (AfD) en Chemnitz.

Manifestantes del partido de extrema derecha Alternativa para Alemania (AfD) en Chemnitz. / .44868553

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Los servicios de inteligencia alemanes han empezado a vigilar de cerca a los sectores más radicales del partido de extrema derecha Alternativa para Alemania (AfD en sus siglas en alemán). AfD organizó la semana pasada la marcha contra la "multiculturalización" en Chemnitz, que desde entonces se ha convertido en un foco de tensiones xenófobas

Los estados federales de Bremen Baja Sajonia han anunciado que han autorizado a la inteligencia regional hacer seguimientos a la sección juvenil del partido. Las solicitudes de seguimiento han sido dirigidas específicamente a la 'Oficina Federal para la Protección de la Constitución', a la que se ha expresado el temor de que el partido ultraderechista se convierta en una amenaza para el texto constitucional alemán. 

Ideas anticonstitucionales

"Se trata de una organización que defiende ideas contrarias a nuestra Constitución", ha dicho Boris Pistorius, ministro del Interior del Gobierno regional de Baja Sajonia. El Gobierno federal, por su parte, no estudia dar ese paso por el momento, según ha precisado el portavoz del ministerio de Interior, Harald Neymanns. En la actualidad, ha explicado el funcionario, no se dan los requisitos para iniciar un seguimiento del partido "en su conjunto". 

El articulo 3 de la Constitución afirma que una fuerza política puede ser objeto de investigaciones de ese tipo si sus militantes persiguen "objetivos anticonstitucionales", como llevar a cabo actividades contra "el orden liberal democrático fundamental", el Estado o el funcionamiento de sus instituciones. "AfD se ha mostrado abierto a las tesis ultraderechistas. Cuando alguien amenaza este Estado debe ser vigilado", ha asegurado Lars Klingbeil, secretario general del partido socialdemócrata (SPD). 

Después Chemnitz

La presidenta de la SPD, Andrea Nahles, ha afirmado que, después de las manifestaciones en Chemnitz, donde se hicieron saludos nazis y se profirieron insultos xenófobos, AfD se ha quitado su "mascara" y se muestra como una "organización pantalla de racistas y fascistas". La Unión Cristianodemocráta (CDU) de la cancillera Angela MerkelAngela Merkel no se ha pronunciado de forma unitaria. 

AfD, por su parte, ha emitido un comunicado, suscrito por todos los miembros de su dirección, en el que califica de "absurda" la medida, reivindica su carácter "democrático", defensor de la Constitución y del estado de derecho. "Esto es absurdo, porque somos un partido democrático que aboga por un Estado de derecho fuerte", señala el comunicado, firmado por Alexander Gauland y Alkice Weidel, juntos con otros líderes del partido.