Crean un fondo para reconstruir el Museo Nacional de Río de Janeiro

Tras una de las peores desgracias para el acervo cultural e histórico de Brasil y para toda la humanidad, luego de la destrucción de gran parte de la colección que albergaba el Museo Nacional de Río de Janeiro, el gobierno brasileño ha anunciado las medidas que aplicará para reconstruir este recinto lo más rápido posible.

En ese sentido, el presidente de Brasil, Michel Temer, anunció la creación de un fondo económico de emergencia para la reconstrucción del Museo Nacional, que fue destruido por un incendio de grandes proporciones. Los recursos serán "destinados para acelerar la reconstrucción en el tiempo más breve posible", informó un comunicado divulgado por la oficina de prensa.

Un gran incendio consume el Museo Nacional de Río de Janeiro

Según este documento, el mandatario "articuló en conversaciones mantenidas hoy con entidades financieras, empresas públicas y privadas la formación de una red de apoyo económico", con lo que se busca que varios sectores de la sociedad intervengan en este proceso para recuperar uno de los recintos más importantes de esta ciudad.

Reclaman la asignación de más recursos

Para comenzar con los trabajos de reconstrucción, el ministro de Educación, Rossieli Soares, ha viajado a Río de Janeiro para observar el predio de 200 años que fue destruido por el siniestro que se inició en la noche del domingo pasado y que un centenar de hombres del Cuerpo de Bomberos, logró dominar el siniestro este lunes cuando todavía se observaba columnas de humo surgidas de entre los escombros.

El museo es un predio perteneciente al estado nacional que está administrado por la Universidad Federal de Río de Janeiro (UFRJ), pero "el aporte de recursos del Ministerio de Cultura es necesario", declaró el rector  de esta universidad, Roberto Leher, que se reunió hoy frente al museo con el director del mismo Alexandre Kellner y denunciaron el poco apoyo financiero que reciben las instituciones de cultura en Brasil.

El rector instó a que las autoridades realicen una "reevaluación de las políticas públicas y del lugar dado a los museos, la cultura, la preservación de la memoria en las políticas nacionales".

Pérdidas invaluables

Las llamas  que comenzaron la tarde del domingo  consumieron el museo más antiguo de Brasil y que contenía uno de los acervos más importantes de Latinoamérica con unos 20 millones de piezas que datan de diferentes periodos históricos con colecciones de paleontología, zoología, botánica, antropología y arqueología, se encontraba el fósil "Luzia" considerado el Homo Sapiens más antiguo de América.

También se encontraba el meteorito "Bendegó", de 5, 3 toneladas, el más grande hallado en territorio brasileño, que no fue afectado por el fuego, pero las llamas causaron "pérdidas inestimables y doscientos años de investigación” literalmente quedaron en cenizas, lamentó el presidente Temer.

"Lo que ocurrió en la madrugada del domingo pasado es algo que tiene que hacer que Brasil piense seriamente en su futuro", añadió el rector. Mientras que Katia Bogea, directora del Instituto del Patrimonio Histórico y Artístico Nacional, aseguró que "el patrimonio no hay como reconstruirlo, se acabó, se acabó (...) fue una muerte anunciada", afirmó.

Finalmente, los peritos de la Policía Federal y de Defensa Civil comenzaron a recorrer el lugar para encontrar pistas sobre el origen del incendio, mientras que el Cuerpo de Bomberos de Río informó que “los dos depósitos hidrantes más próximos estaban sin agua, hubo que hacer una maniobra para traer agua de otros puntos de la ciudad y de un lago próximo mediante una bomba".