La ONU defiende que las confesiones obtenidas mediante tortura deberían ser invalidadas

La tortura es comúnmente aplicada durante el arresto, el traslado y los interrogatorios en México

Jan Jarab junto a una víctima de tortura y violencia sexual durante su detención.

Jan Jarab junto a una víctima de tortura y violencia sexual durante su detención. / periodico

Begoña González

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El representante de la Oficina en México del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (ONU-DH), Jan Jarab, ha condenado "la utilización de la tortura como método de investigación criminal" para extraer "confesiones" de supuestos delincuentes.

"Que a causa de la tortura una persona confiese haber cometido un delito no significa haber probado su culpabilidad, significa haber vencido su capacidad para resistir el dolor", ha sostenido Jarab en el Día Internacional en Apoyo de las Víctimas de la Tortura.

INSEGURIDAD Y TORTURA

México es uno de los países con mayores tasas de inseguridad del planeta. Según el informe de Amnistía Internacional de la situación de los distintos países durante 2017 y 2018, en México, "las detenciones arbitrarias generalizadas siguen derivando en torturas y otros malos tratos, desapariciones forzadas y ejecuciones extrajudiciales". 

Del mismo nodo, en febrero, el relator especial de la ONU sobre la tortura hizo público un informe de seguimiento a una visita anterior a México, realizada en 2014. En él, concluyó que la tortura y otros malos tratos seguían siendo generalizados e incluían un "uso alarmante de la violencia sexual como método de tortura frecuente".

En este contexto de desprotección de los detenidos, el representante de la ONU-DH ha calificado de "anacrónicas y reprobables" las expresiones públicas que justifican las confesiones extraídas mediante tortura. Y es que, a pesar de la creación estatal de una fiscalía especializada para casos de tortura durante el mes de mayo de este año y el hecho de que en 2017, México aprobara la Ley General para Prevenir, Investigar y Sancionar la Tortura y otros Tratos o Penas Crueles, Inhumanos o Degradantes, la tortura sigue estando a la orden del día en el sistema policial mexicano. 

LA MITAD DE LOS DETENIDOS SUFREN VIOLENCIA

"El 46 % del total de personas que declararon ante el Ministerio Público tras su detención dijeron haber recibido algún tipo de amenaza o agresión para dar otra versión de los hechos", según se desprende de la Encuesta Nacional de Población Privada de Libertad de 2016, del Instituto Nacional de Estadística.

Por ello, el representante de la ONU ha urgido a que las autoridades mexicanas excluyan "todas las pruebas obtenidas mediante tortura u otros malos tratos" porque son "pruebas inválidas" y porque, asegura, "la tortura no hace a una persona culpable o inocente de un delito, la hace víctima de un delito".