cambio en el gobierno

May nombra como ministro de Interior a un hijo de inmigrantes

Sajid Javid, de origen paquistaní, sustituye a Amber Ruud, que dimitió el domingo por diversos escándalos sobre el control y el trato los 'sin papeles'

Amber Rudd, a su llegada a Downing Street, el pasado 24 de abril.

Amber Rudd, a su llegada a Downing Street, el pasado 24 de abril. / PT jrn

Begoña Arce / Londres

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

Sajid Javid ha sido nombrado por Theresa May  nuevo ministro del Interior en sustitución de Amber Rudd, que dimitió el domingo por la noche tras varios días en la cuerda floja por diversos escándalos sobre el control y el trato a los inmigrantes.  Rudd, de 54 años, era una de las figuras más importantes en el equipo ministerial y la voz más poderosa en el gabinete en favor del mantenimiento del Reino Unido en la Unión Europea. Su salida desestabiliza el delicado equilibrio entre defensores y oponentes al ‘brexit’ dentro del gobierno. La dimisión es la mayor crisis a la que se enfrenta  la primera ministra desde su acceso al cargo y se produce a pocos días de las elecciones locales que tendrán lugar el jueves.

Engaño involuntario

Rudd  no ha sobrevivido a las revelaciones de que su departamento se había fijado cuotas de inmigrantes ilegales a expulsar del país. La ministra fue económica con la verdad sobre el asunto, aunque ahora alega que se equivocó. Ante una comisión parlamentaria negó en un principio que tales cuotas existieran. Después se retractó y aceptó que había tales cuotas, pero afirmó no tener conocimiento de ellas.  El domingo sin embargo el diario The Guardian publicó una carta firmada por la propia Rudd dirigida a la primera ministra, en la que marcaba su objetivo “ambicioso, pero factible” de deportar un 10% más de inmigrantes ilegales en los próximos años. “Involuntariamente he engañado a la comisión parlamentaria de asuntos de interior sobre los objetivos de desplazamiento de los inmigrantes clandestinos”, reconoció en su carta de dimisión.

Repulsa general

Rudd se vio envuelta en el llamado escándalo de Windrush, el tratamiento dado a los ciudadanos de origen caribeño que llegaron invitados al Reino Unido tras la segunda guerra mundial para reconstruir el país, instalarse en él y a los que ahora se les niega la ciudadanía, han sido privados de todos los derechos y están siendo deportados. El trato vergonzoso de unos ciudadanos a los que jamás se pidió documentos para justificar identidad y residencia y de golpe se ven tratados como inmigrantes clandestinos ha suscitado una repulsa general.   

Ambiente hostil

La oposición ya había pedido hace días la renuncia de Rudd y 200 diputados firmaron una carta criticando la política de inmigración de la ministra, acusándola estar improvisando medidas sobre la marcha para acallar las protestas. El escándalo coincidió con la cumbre de la Commonwealth en Londres celebrada entre el 16 y el 18 de abril, y May se vio obligada a pedir disculpas a los dirigentes de los países caribeños presentes en el encuentro. Es sin embargo la propia primera ministra, antecesora de Rudd en el puesto de Interior, la que creó la política de  “ambiente hostil”  contra la inmigración, que ha desembocado en el desastre de Windrush. La oposición laborista exige hoy su comparecencia urgente en la Cámara de los Comunes.  

Hijo de un conductor de autobuses paquistaní

El nuevo titular de Interior, Sajid Javid de 48 años, era hasta ahora ministro para las Comunidades. Javid es hijo de inmigrantes. Su padre era un conductor de  autobuses paquistaní que vino al Reino Unido en los años sesenta. Javid había declarado que su propia familia podía haberse visto directamtne afectada por la actual crisis.