CONFLICTO EN EL MEDITERRÁNEO

Bruselas se desentiende del "incidente" con Proactiva Open Arms

El barco de Proactiva Open Arms a su llegada al puerto siciliano de Pozzallo, el 17 de marzo.

El barco de Proactiva Open Arms a su llegada al puerto siciliano de Pozzallo, el 17 de marzo. / periodico

Silvia Martinez

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

La Comisión Europea está al tanto del incidente ocurrido el pasado viernes con el barco de la ONG catalana Proactiva Open Arms pero ha eludido condenar la actuación de los guardacostas libios, la inmovilización del barco en Siciliainmovilización del barco por parte de las autoridades italianas o la acusación de Italia contra la oenegé de favorecer la inmigración clandestina y la asociación criminal. “De acuerdo con lo que entendemos, las guardacostas libios actuaban en sus aguas territoriales y no tenemos comentarios que añadir en este momento”, se ha limitado a señalar la portavoz de inmigración, Natasha Bertaud.

El Ejecutivo comunitario tuvo conocimiento del “incidente” el viernes pasado. Desde entonces, ha explicado la portavoz, están en contacto con las autoridades italianas e incluso el comisario de Inmigración, Dimitrios Avramopoulos, llegó a hablar por teléfono con el ministro italiano Marco Minitti. Es más, en Bruselas insisten en que se trata de un asunto competencia exclusiva del Gobierno italiano y confían en que seguirán gestionando la situación.

La Comisión Europea parte de la base de que si ha habido un incidente es porque no se ha seguido el código de conducta adoptado el año pasado por las autoridades italianas para enmarcar el trabajo de las oenegés que ayudan en el Mediterráneo en las operaciones de salvamento de inmigrantes, aunque ha evitado culpar a la oenegé catalana. “Pedimos a todas las partes en el futuro que respeten no solo el derecho internacional, sino también este código de conducta”, ha instado Bertaud.

¿Aguas internacionales o libias?

Según la información que ha trascendido hasta ahora, las autoridades italianas notificaron a los guardacostas libios, tunecinos, malteses y a la oenegé Proactiva Open Arms de la existencia de una embarcación en dificultades el viernes por la mañana. Los guardacostas libios, según fuentes comunitarias, respondieron que se hacían cargo de la situación, por producirse en sus aguas territoriales, y los italianos informaron al resto de que los libios asumían el rescate.

Aún así, explican las mismas fuentes, Proactiva Open Arms decidió rescatar a los dos centenares de inmigrantes, lo que derivó en un incidente de seguridad que obligó a la oenegé a pedir protección a España, que a su vez tuvo que solicitar permiso a Italia para desembarcar a los inmigrantes. Se trata del primer incidente de estas características desde que Italia adoptó el código de conducta.

España pide aclaraciones

Las autoridades españolas, según ha explicado el ministro de Exteriores Alfonso Dastis también siguen muy de cerca el caso a través del consulado en Nápoles y el cónsul honorario en Catania, que están en contacto con el capitán del barco y con los responsables de la oenegé. “Lo que queremos es aclarar la situación, que cada uno en esa situación se atenga a las obligaciones que le incumben en virtud del derecho internacional y el derecho comunitario. Cuando aclaremos la situación ya veremos quién es responsable de qué”, ha avisado.

“No entiendo nada hasta que no aclaremos los extremos de qué se les acusa y cuál es la justificación para esas acusaciones”, se ha limitado a señalar este lunes desde el consejo de ministros de Exteriores de la UE. “Recoger personas en alta mar en una misión de salvamento y rescate no nos parece que sea algo que pueda objetarse”, ha añadido. También una quincena de eurodiputados españoles han interpelado a la Comisión Europea a cuenta de la inmovilización de la embarcación y han interrogado al Ejecutivo sobre su opinión en torno a la acusación vertida contra la oenegé y para que Bruselas aclare si va a realizar gestiones para conseguir la retirada de los cargos.