ESCÁNDALO EN EEUU

El abogado de Trump admite que pagó de su propio bolsillo a la actriz porno

Stormy Daniels, en una imagen de febrero del 2017.

Stormy Daniels, en una imagen de febrero del 2017. / periodico

Ricardo Mir de Francia

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Antes de que Donald Trump llegara a la Casa Blanca, la mera sospecha de que un presidente podría haber tenido una relación extramatrimonial con una actriz porno hubiera acarreado serias consecuencias. Con Trump, todo es diferente. Parece ser inmune al escándalo y hasta ahora ha logrado que esa historia quede en un discreto segundo plano ante el aluvión de sobresaltos que cada semana se producen en su Administración. Pero las sospechas no han desaparecido y la historia acaba de escribir un nuevo capítulo. El abogado personal del presidente, Michael Cohen, ha reconocido que pagó 130.000 dólares de su bolsillo a la actriz Stormy Daniels, quien dijo hace unos años haber mantenido un encuentro sexual con el magnate. La revelación es significativa porque Cohen había negado hasta ahora categóricamente esos pagos, fueran suyos o de su cliente.

Quizás lo más sorprendente es que ha sido el propio Cohen, al servicio de Trump desde hace una década, quien ha reconocido el pago. “En una transacción privada en el 2016, utilicé mis propios fondos personales para facilitar el pago de 130.000 dólares a Stephanie Clifford”, ha dicho en un comunicado en el que utiliza el nombre legal de la actriz [Stormy es su nombre artístico]. “Ni la Trump Organization ni la campaña de Trump estuvieron involucradas en la transacción. Tampoco me reembolsaron el pago, ni directa ni indirectamente”. Sus palabras se producen después de que una organización que vela contra los conflictos de interés y la financiación irregular esgrimiera que el pago a la actriz podría considerarse como una donación ilegal de campaña.

Giro de 180 grados

Cohen no ha explicado por qué se hizo la transacción o si respondía a las instrucciones de su cliente. Únicamente ha añadido que fue un pago totalmente “legal”, que no responde a una contribución de campaña ni a un gasto asociado a ella. En cualquier caso, es un giro de 180 grados respecto a la respuesta que hasta ahora había aportado el entorno de Trump a las informaciones publicadas inicialmente por el Wall Street Journal en diciembre. El diario conservador y financiero reveló entonces que la actriz cobró en octubre del 2016, un mes antes de las elecciones, 130.000 dólares a cambio de su silencio y un acuerdo de confidencialidad que le impide volver a hablar sobre el asunto.

“Esta es la segunda vez que me preguntan por estas estrafalarias alegaciones contra mi cliente. Ustedes han tratado de perpetuar esta falsa narrativa desde hace más de un año”, respondió por entonces Cohen a la información del ‘Journal’. Lo que era falso entonces es ahora verdad, aunque el abogado sigue negando que el supuesto encuentro sexual se produjera. Fue la propia Daniels quien habló de ello hace unos años en varias entrevistas. La actriz contó que, tras conocer al empresario en un torneo de golf para famosos en el 2006, este la invitó a cenar en su habitación y después de la cena acabaron liándose. Desde la firma del contrato de confidencialidad no ha vuelto a repetirlo, aunque tampoco negó que se acostara con Trump cuando el presentador Jimmy Kimmel se lo preguntó recientemente en una entrevista.