La marcha de ciudadanos de la UE hace caer la inmigración neta en el Reino Unido tras el 'brexit'

El 'brexit' se empieza a notar en los índices de inmigración. El saldo neto de inmigración internacional en el Reino Unido ha caído al nivel más bajo de los últimos tres años después de que se haya producido un incremento en la cifra de ciudadanos de países de la Unión Europea (UE) que se han marchado del país tras el referéndum de junio del 2016 en que ganó la opción de abandonar la Unión Europea. También se ha producido un descenso de las llegadas al territorio británico desde el resto de la UE.

La Oficina Nacional de Estadística (ONS) ha publicado este miércoles los últimos datos sobre migración. La inmigración neta --es decir la diferencia entre los ciudadanos no británicos que llegan al Reino Unido y los que se van-- fue de 246.000 hasta marzo del 2017, contando desde los 12 meses anteriores, lo que supone una caída de 81.000 respecto al año anterior. 

Esto supone que en el año que terminó (a efectos estadísticos) en marzo del 2017 la inmigración fue de 588.000 personas (50.000 menos que en el período anterior) y la emigración internacional desde el Reino Unido fue de 342.000 (31.000 más). 

Más de la mitad de este cambio se debe al descenso de la inmigración neta de ciudadanos de la UE, que se ha reducido en 51.000. Es el nivel más bajo desde diciembre de 2013. Esta cifra es el resultado de un incremento de la emigración de ciudadanos de la UE que residían en el Reino Unido, cifrado en 33.000 respecto al periodo anterior y de un descenso, cifrado en 19.000 respecto al año anterior, de la inmigración al Reino Unido desde la UE. 

La ONS ha señalado que las cifras indican que han sido en gran medida los ciudadanos de los países del centro y el este de Europa (el denominado UE8) los que han regresado a sus países de origen. Estos países son la República Checa, Hungría, Polonia, Estonia, Lituania, Letonia, Eslovaquia y Eslovenia; es decir, los que entraron en la UE en el 2004. También se han marchado ciudadanos de Rumanía y Bulgaria (el denominado UE2), países que tras su entrada en la UE tuvieron una moratoria de varios años para poder acceder libremente al mercado de trabajo europeo.

En cualquier caso, todas estas cifras has que tomarlas con precaución. Porque si bien es cierto que 122.000 ciudadanos de la UE han abandonado el Reino Unido entre abril de 2016 y marzo de 2017, no lo es menos que 248.0000 ciudadanos de la UE se han instalado en el Reino en el mismo periodo. Si se cuentan solo los ciudadanos de los países "occidentales" (los que ya eran miembros de la UE antes del 2004) el incremento de llegadas ha sido incluso superior al del período anterior. 

Demasiado pronto

"Estos resultados indican que el resultado del referéndum sobre la UE puede haber influido tanto en la decisión de emigrar al Reino Unido como en la decisión de marcharse del Reino Unido, particularmente entre los ciudadanos del grupo UE8", ha señalado un portavoz de la ONS. "Pero es demasiado pronto para decir si esto es una indicación de una tendencia a largo plazo", ha añadido.

Los datos de la ONS indican que la inmigración desde otros países ajenos a la UE también ha descendido y la emigración se ha incrementado. El trabajo sigue siendo el motivo principal por el que las personas se mudan de un país a otro, pero según la ONS, en la mayoría de los casos, ahora el trabajador se desplaza solo si tiene un empleo y no tanto para buscarlo.

El Gobierno de Theresa May se comprometió a reducir la inmigración neta hasta niveles inferiores a 100.000. El ministro de Inmigración, Brandon Lewis, se ha apresurado a aplaudir los datos. "Es bueno ver que las cifras bajan", ha afirmado Lewis.

Preocupación empresarial

Pero el mundo de los negocios no está tan contento. Un portavoz del Institute of Directors, una organización de directivos y emprendedores, ha declarado, comentando las estadísticas publicadas por la ONS, que "nadie debería celebrar estas cifras". "Dado que el desempleo se encuentra en el nivel más bajo de toda la historia (4,5%), sin los tres millones de ciudadanos de la UE que viven aquí en el Reino Unido tendríamos un déficit agudo de trabajadores en el mercado laboral", ha añadido.

En términos similares se ha pronunciado la Confederación de la Industria Británica, la principal organización empresarial del país. "La pérdida de estas capacidades vitales debería preocuparnos", ha señalado.