El matrimonio homosexual se hace fuerte en Europa

Con la reciente aprobación del matrimonio homosexual en Alemania, Europa da un paso hacia delante en el reconocimiento de los derechos del colectivo

Los derechos de la comunidad LGTBI en Europa.

Los derechos de la comunidad LGTBI en Europa. / periodico

CARLES PLANAS BOU / BERLÍN

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Después de una semana muy intensa, este viernes, el Parlamento federal alemán ha dado luz verde a la legalización del matrimonio homosexual.  Con una amplia mayoría de 393 votos a favor y 226 en contra, el Bundestag ha aprobado una larga reivindicación del colectivo de gais y lesbianas del país y ha llevado a la primera potencia económica europea a ser el vigesimosegundo país que legaliza el matrimonio igualitario en todo el mundo.

Con esta aprobación Europa ha dado un emujón a la defensa de los derechos del colectivo en su territorio en el que existen situaciones dispares, tal y como puede verse en el gráfico elaborado por Statista

PIONEROS

En 2000 los Países Bajos fueron el primer país del mundo en legalizar el matrimonio homosexual. Dos años más tarde, Bélgica seguía el ejemplo de su vecino. En 2005, y frente a la oposición del PP y la iglesia católica, el gobierno de Zapatero dio luz verde a la unión entre personas del mismo sexo. Más recientemente, Portugal, Franca y el Reino Unido se han sumado a esa medida.

PROGRESISMO NÓRDICO

A excepción de las repúblicas bálticas, todos los países nórdicos contemplan el matrimonio gay y su derecho a la adopción en sus leyes. Noruega y Suecia lo hicieron con el apoyo de la iglesia en 2009. Islandia subió al carro en 2010, permitiendo a su primera ministra casarse con su pareja. Dinamarca lo hizo en 2012 y en Finlandia entró en vigor este año.

UN CENTRO-ESTE CONSERVADOR

En el centro y el este del continente tan solo Luxemburgo desde el 2015 y Eslovenia y Alemania desde el 2017 toleran el matrimonio homosexual. Países fuertemente marcados por la religión como las mediterráneas Italia, Grecia o Polonia le han dado la espalda. Siete países como Hungría o Serbia lo prohíben en su Constitución y otros como Chipre y Bielorrusia incluso prohíben el servicio en el ejército de los homosexuales.