Testigos del atropello en un mercadillo de Berlín: "No se paró, continuó"

Calma. Este era anoche el llamamiento más repetido por la policía de Berlín, que pidió a través de las redes sociales a los habitantes de la capital alemana que permanecieran en casa y evitasen difundir rumores y vídeos del mercadillo navideño atacado, para proteger a las víctimas y a sus familias. Específicamente, la policía pidió a los ciudadanos no acercarse al lugar donde ocurrió el atropello, en la concurrida Breitscheidplatz, aunque descartó que hubiera nuevas amenazas para la ciudadanía

Un fuerte dispositivo policial mantenía acordonado anoche, horas después, el mercadillo navideño donde se estrelló el camión, en pleno centro berlinés, a dos pasos de la Iglesia del Recuerdo, en ruinas, y una de las principales atracciones de la ciudad, y de la avenida Kurfürstendamm, la más comercial de Berlín. El ambiente era muy tenso en el lugar, entre un constante ir y venir de sirenas, de vehículos de la Cruz Roja, ambulancias y bomberos e incertidumbre sobre lo sucedido. 

Algunos testigos daban su versión de los hechos. Una turista dijo a la agencia France Presse desconocer si el chófer "estaba ebrio" o se lanzó contra la multitud a propósito. "Pero no se paró, continuó", explicó.

Un ciudadano británico, Mike Fox, explicó a Associated Press cómo el camión pasó solo a tres metros de él antes de estamparse contra los puestos del mercado. "Definitivamente ha sido deliberado", explicó. Según añadió, él ayudó a varias personas con las extremidades rotas y vio a otras atrapadas bajo los tenderetes de madera. 

Jan Hollitzer, subdirector del diario 'Berliner Morgenpost', explicó a la CNN: "He oído un gran ruido. He llegado hasta el mercado y he visto el caos, mucha gente herida. Ha sido realmente traumático". En el mismo lugar de los hechos, el alcalde de la capital, el socialdemócrata Michael Müller, aseguró en declaraciones a los medios que la situación era "dramática". La policía trataba de facilitar el encuentro entre familiares.

Duelo de Merkel y solidaridad de Hollande

Evitando pronunciarse hasta que se conozcan más detalles del caso, la cancillera alemana Angela Merkel se declaró "en duelo". Por su parte, el presidente francés François Hollande señaló que los franceses "comparten el dolor" de los alemanes "frente a esta tragedia que golpea a toda Europa" mientras la icónica Torre Eiffel se iluminaba con los colores de la bandera alemana.

En España, el ministro del Interior, Juan Ignacio Zoido, escribió en un tuit: "Otra tragedia difícil de entender que nos conmueve. Desde el Gobierno de España mandamos todo nuestro cariño a las víctimas de Berlín".

El lugar del atropello masivo en Berlín, del que aún se investiga si se trata de un atentado terrorista, es un punto neurálgico de los berlineses y de los turistas durante las fechas navideñas. Allí se sitúa uno de los mercadillos más concurridos de la capital donde las famílias van a comprar comida y regalos. Los mercadillos se han convertido en una tradición navideña muy arraigada en Alemania y, desde hace unos años, las autoridades las vigilan con especial atención conscientes de que está en el punto de mira de los grupos yihadistas. 

Seguridad reforzada en Francia

Tras los acontecimientos de Berlín, el Ministerio del Interior francés anunció el reforzamiento de la seguridad en los mercadillos de todo el país. El pasado mes de noviembre, los servicios secretos de la policía francesa detuvieron a siete presuntos yihadistas en Estrasburgo y Marsella en operaciones que supuestamente permitieron abortar un atentado que ya estaba en una fase muy adelantada de prepapración.

En Estrasburgo, el mercado de Navidad es el más famoso de toda Francia y ya fue objeto de una tentativa de ataque terrorista en el 2000.