El presunto pirateo ruso a EEUU, en seis fechas clave

Foto de archivo de la sede del FBI, la Oficina Federal de Investigación de EEUU.

Foto de archivo de la sede del FBI, la Oficina Federal de Investigación de EEUU. / periodico

ANTONIO BAQUERO / BARCELONA

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LA FILTRACIÓN

El 22 de julio, Wikileaks publicó 19.252 correos electrónicos y 8.034 archivos adjuntos que previamente habían sido sustraídos mediante un pirateo del Comité Nacional Demócrata. La filtración incluía varios mails en que quedaba patente como la cúpula demócrata había maniobrado a favor de Hillary Clinton en su pugna con su rival en las primarias, Bernie Sanders: Las revelaciones forzaron la dimisión de Debbie Wasserman, la presidenta del Comité. El partido republicano también sufrió un ataque informático, aunque los datos robados en el hackeo no se hicieron públicos. Los que sí fueron difundidos fueron una serie de correos pirateas al exsecretario de Estado Colin Powell en que califica a Donald Trump de “desgracia nacional”.

LAS DENUNCIAS

Wikileaks no reveló su fuente aunque desde el 25 de julio el equipo de campaña de Clinton acusó a Rusia de estar detrás del pirateo informático para perjudicar a la candidata. El 30 de agosto, la Oficina Federal de Investigación de Estados Unidos (el FBI) aseguró tener pruebas de que piratas informáticos extranjeroshan intentado atacar las páginas web dedicadas a la organización de las elecciones presidenciales del próximo 8 de noviembre en los estados de Illinois y Arizona.

LA INVESTIGACIÓN

El 5 de septiembre, el ‘Washington Post’ reveló que varias agencias del Gobierno de EEUU investigaban los ataques informáticos así como una campaña de propaganda para desprestigiar la democracia estadounidense y socavar su influencia en el mundo. Fuentes del diario sostenían que “no hay pruebas definitivas” al respecto, aunque se estaban tomando medidas para prevenir intrusiones que puedan alterar las elecciones de noviembre.

LA PRIMERA ACUSACIÓN FIRME

El 7 de octubre, EEUU acusó formalmente al Gobierno ruso de piratear los sistemas informáticos de varias de sus instituciones y uno de sus partidos políticos para robar información e influir en las elecciones presidenciales de noviembre. “La comunidad de inteligencia de EE UU tiene la certeza de que el Gobierno ruso dirigió las recientes intrusiones en los correos electrónicos de personas e instituciones estadounidenses, incluyendo organizaciones políticas”, dice el comunicado firmado conjuntamente por la Oficina del Director de la Inteligencia Nacional y el Departamento de Seguridad Interna. “Estos hurtos y revelaciones pretenden interferir en el proceso electoral de EE UU”.

LAS SOSPECHAS DE AMAÑO

El 22 de noviembre, un grupo de expertos informáticos reclamaron un recuento de votos en los estados de Wisconsin, Pensilvania y Michigan. Los expertos justifican su petición de recuento señalando que han encontrado un patrón que puede indicar un pirateo informático de los aparatos de cómputo de votos. Así, señalan que en los distritos donde se votaba en esas máquinas de voto táctil, Clinton obtuvo un 7% menos de votos que en aquellos en que se empleaban papeletas. No obstante, solo disponen de ese patrón y no de pruebas que acrediten el pirateo.