PETICIÓN EN BRUSELAS

Fariñas pide a la Eurocámara que vote contra el acuerdo entre la UE y Cuba

El disidente cubano asegura que el pacto supondría "50 años de dictadura" para la isla y reclama una renegociación

Fariñas (centro) se dirige a los eurodiputados en la comisión de derechos humanos, en Bruselas, este miércoles.

Fariñas (centro) se dirige a los eurodiputados en la comisión de derechos humanos, en Bruselas, este miércoles. / periodico

LUIS VELLÓN / BRUSELAS

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El opositor cubano Guillermo Fariñas ha solicitado ante la subcomisión de Derechos Humanos y de Exteriores del Parlamento Europeo que el pleno de la Eurocámara rechace el acuerdo de diálogo político que en marzo cerraron la Unión Europea Cuba para normalizar sus relaciones bilaterales. Previamente a dicha intervención, Fariñas había afirmado a la agencia France Presse que dicho acuerdo se traduciría en “50 años más de dictadura” ya que fortalecería al Gobierno de Raúl Castro. “Ya que ustedes no pueden modificar este acuerdo, por favor, voten 'no' para que se renegocie un acuerdo legítimo”, ha pedido a los eurodiputados.

Condecorado en el 2010 con el premio Sájarov a la Libertad de Conciencia que concede la Eurocámara y conocido por sus huelgas de hambre como protesta contra el castrismo, Fariñas ha asegurado que la oposición cubana se ha quedado al margen de las negociaciones que en los últimos dos años han tenido lugar entre Bruselas y La Habana. La UE espera tener el acuerdo totalmente cerrado antes de final de año, para lo cual la Comisión Europea solicitó el pasado septiembre el apoyo de los 28 estados miembros, pero también se necesita el voto favorable de la Eurocámara. El objetivo final es derogar la posición común impulsada en 1996 por el expresidente español José María Aznar, que restringe las relaciones políticas entre Cuba y la UE.

DEFINIR PLAZOS Y COMPROMISOS

Fariñas también ha afirmado que “es necesario conocer la situación de los derechos humanos en Cuba antes de firmar el acuerdo” y ha mostrado su desconfianza con que el Gobierno de los Castro cumpla con lo pactado. Según él, existe la necesidad de que cualquier acuerdo con las autoridades cubanas defina bien los plazos y los compromisos, así como las consecuencias de no cumplirlos, “algo de lo que adolece este documento". Las críticas también han ido dirigidas a la UE, ya que si esta “ha sido y es un garante de la defensa de los derechos humanos”, no debería suprimir su juicio moral y su compromiso democrático en el caso de Cuba.

Frente al discurso del periodista y activista cubano, el eurodiputado español de Izquierda Unida Javier Couso ha mostrado su disconformidad con las declaraciones de este, afirmando que las conversaciones para cerrar el acuerdo van "en la buena dirección" y contribuirán a enterrar "la infame posición común". Para la española Beatriz Becerra, del grupo de la Alianza de los Demócratas y Liberales por Europa (ALDE), el acuerdo sí que contiene unos plazos concretos para lograr avances en el ámbito de los derechos humanos.