LA CARRERA HACIA LA CASA BLANCA

Hillary Clinton acaricia la nominación demócrata

La favorita demócrata recupera su fuerza frente a Sanders y vuelve a mirar a noviembre y a Trump

Hillary Clinton saluda a sus seguidores a su llegada a un acto electoral en Palm Beach (Florida).

Hillary Clinton saluda a sus seguidores a su llegada a un acto electoral en Palm Beach (Florida). / CK JWE**DC**

IDOYA NOAIN / NUEVA YORK

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La nominación del Partido Demócrata está un paso más cerca para Hillary Clinton. La exsecretaria de Estado se ha apuntado importantes victorias en las primarias celebradas este martes, no solo porque aumentan su ventaja cada vez más inalcanzable en el número de delegados sobre Bernie Sanders sino, sobre todo, porque ha frenado el impulso que el senador de Vermont había tomado la semana pasada con su importante e inesperada victoria en Michigan.

Clinton casi ha doblado en votos a Sanders en Florida y se ha apuntado también contundentes victorias en Carolina del Norte y en Ohio, un estado industrial que parecía el terreno más abonado para el progresista discurso económico del senador. 

"Nos estamos acercando a asegurarnos la nominación", ha dicho en West Palm Beach una Clinton tan afónica como exultante por unas matemáticas que cada vez están más de su lado. Sin contar la abrumadora ventaja en el número de superdelegados (472 frente a los 23 de Sanders), Clinton ha sumado en las urnas ya casi 300 delegados más que el senador, lo que le acerca a los 2.382 necesarios para asegurarse la nominación en la convención de julio en Filadelfia y es casi el triple de ventaja que Barack Obama le llevaba a ella a estas alturas en 2008. Y aunque Sanders puede obtener buenos resultados en próximas citas en estados como Nueva York, Maryland, California o Wisconsin, necesitaría ganar esos estados y muchos más por 15 puntos de ventaja, lo que parece improbable. 

La gran noche de Clinton (otra vez con masivo respaldo de hispanos y negros y una ligera mayoría entre votantes blancos) le permite, una vez más, dejar otra vez en segundo plano la lucha intestina para volver a centrarse en el duelo de noviembre, en el que su rival más probable por ahora es Donald Trump. Y aunque la candidata ha insistido en el discurso dedicado a los demócratas y ha pedido que le sigan apoyando con pequeñas donaciones (el terreno donde Sanders sigue aventajándole), es al enfrentamiento de de las presidenciales al que ha dedicado buena parte de su discurso este martes.

Clinton ha definido las próximas elecciones presidenciales como posiblemente "unas de las más imporantes" de las vidas de los votantes estadounidenses y, rompiendo con la costumbre de no mencionarlo por nombre, Clinton ha centrado su intervención en la denuncia de Trump, de sus incendiarias declaraciones y propuestas y hasta de su eslogan. "Nuestro comandante en jefe tiene que ser capaz de defender nuestro país, no de avergonzarlo", ha dicho en un momento. En otro ha asegurado que el empresario "cuando pide cercar a 12 millones de inmigrantes, vetar la entrada de todos los musulmanes a EEUU o defiende la tortura no se hace más fuerte, se equivoca".

Pese a los malos resultados de la noche, Sanders no tira la toalla y en un discurso de casi una hora en Phoenix (Arizona) centrado en su mensaje de justicia económica y social ha demostrado que sigue empeñado en mantener viva una campaña que, según ha dicho, "ha desafiado todas las expectativas".