Merkel y Hollande viajan a Kiev y Moscú con un nuevo plan de paz

Los máximos dirigentes de Alemania y Francia, Angela Merkel y François Hollande, han anunciado este jueves una nueva iniciativa de paz para Ucrania y han viajado a Kiev para presentarla al presidente ucraniano Petró Poroshenko. Los dos mandatarios irán el viernes a Moscú para presentar su plan al presidente ruso, Vladímir Putin.

La gira relámpago de Merkel y Hollande coincide con la del secretario de Estado de EEUU, John Kerry, que ayer también se encontraba en Kiev. Contrariamente a los dirigentes europeos, el jefe de la diplomacia estadounidense no tiene intención de viajar a Moscú.

Kerry precisó que, aunque la apoya, no está implicado en la iniciativa de Merkel y Hollande. El dirigente señaló que aunque EEUU desea una solución diplomática, no cerrará los ojos ante la agresión rusa. «Rusia debe cesar inmediatamente su apoyo a los separatistas y sentarse a la mesa de negociaciones. No podemos cerrar los ojos al hecho de que suministros militares rusos han cruzado la frontera ucraniana; no podemos cerrar los ojos ante los combatientes rusos que con uniformes sin insignias también cruzan la frontera», afirmó Kerry tras reunirse con Poroshenko.

Aunque se desconocen los detalles de la iniciativa francoalemana, los dirigentes ucranianos parecían recelar de la misma. «Lo más importante es la paz, pero no estudiaremos ningún plan que ponga en duda la integridad territorial, la soberanía, la independencia y el futuro europeo de Ucrania», afirmó el primer ministro ucraniano, Arseni Yatseniuk. Moscú, en cambio, señaló que esperaba que las conversaciones con Merkel y Holande fueran «constructivas».

En medio de este pulso y ante el recrudecimiento de la guerra en el este de Ucrania en las últimas semanas, Kerry anunció que Obama tomará una decisión «en breve» sobre la posibilidad de proporcionar «armas defensivas» a Kiev. «El presidente [Obama] estudia diversas opciones». Según el secretario de Estado estadounidense, la reunión que Obama mantendrá con Merkel el próximo lunes en Washington será «muy importante» al respecto.

DIVISIÓN EN LA OTAN

Merkel rechazó rotundamente esta semana un posible suministro de armas a Ucrania, aduciendo que el arreglo del conflicto solo puede ser político. La creciente división entre los aliados sobre esta cuestión se reflejó ayer en la reunión que celebraron en Bruselas los ministros de Defensa de la OTAN. Varios de los ministros europeos se pronunciaron en contra de enviar armas al Ejército ucraniano, más allá de material militar «no letal», lo que hace augurar una brecha en las relaciones transatlánticas si finalmente Washington decide armar a Kiev.

En cuanto al plan de paz francoalemán, ni París ni Berlín han revelado sus detalles en público. Antes de volar a Kiev, Hollande se limitó a afirmar en una rueda de prensa que «juntamente con Angela Merkel, hemos decidido lanzar una nueva iniciativa. Haremos una nueva propuesta para resolver el conflicto que esté basada en la integridad territorial de Ucrania». «Durante varios días, Merkel y yo misamo hemos trabajado en un texto que pueda ser aceptable para todos», añadió.

Fuentes cercanas a la presidencia ucraniana dijeron que el objetivo de la propuesta francoalemana es «congelar el conflicto» como en Transnistria, la región separatista moldava, con el despliegue de fuerzas de pacificación entre los bandos contendientes.

Kiev y sus aliados occidentales desean que los combatientes en el este de Ucrania regresen a las líneas acordadas en un alto el fuego el pasado septiembre. Los rebeldes prorrusos, por su parte, quieren mantener los avances territoriales que han logrado desde entonces.