Alarma ante la infiltración de yihadistas desde Siria

Periodistas de AFP se concentran en contra el ataque a 'Charlie Hebdo?

Periodistas de AFP se concentran en contra el ataque a 'Charlie Hebdo?

ANTONIO BAQUERO
BARCELONA

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Las fuerzas de seguridad de toda Europa llevan semanas en alerta ante la aparición de informaciones que apuntan a que tanto el Estado Islámico (EI) como la franquicia de Al Qaeda en Siria han enviado células terroristas para que se infiltren en territorio europeo con el objetivo de cometer grandes atentados como el ataque del miércoles contra la revista 'Charlie Hebdo'. El hecho de que los autores de esa masacre, que fueron calificados como «héroes» en la radio del Estado Islámico, mostraran una gran capacidad asesina, que solo puede obtenerse mediante entrenamiento y experiencia en combate, ha reforzado esa preocupación por la llegada de los 'retornados'. Así es como se llama a individuos que se han ido como voluntarios a la yihad en Siria, de donde han vuelto entrenados y curtidos en combate.

De la Unión Europea se han desplazado a Siria 5.000 personas, la inmensa mayoría de los cuales se han unido al Estado Islámico. En las filas del Estado Islámico hay más de 1.000 franceses.

UNO SIN LOCALIZAR

En el caso de España, 17 yihadistas procedentes de territorio español fallecieron el pasado año en las zonas de conflicto del Estado Islámico y ocho de ellos retornaron a nuestro país, de los que siete fueron detenidos, con lo que hay uno en paradero desconocido. Según la agencia EFE, los expertos calculan que unos 36 yihadistas procedentes de España permanecen en Siria e Irak.

Aunque aún está por confirmar si los hermanos Cherif y Said Kouachi han regresado de Siria e Irak, por la manera en que actuaron está claro que en algún lugar recibieron entrenamiento y que posiblemente participaron en combate. Hasta ahora, el único atentado cometido en Europa por un 'retornado' fue el ataque perpetrado por Mehdi Nemmouche contra el museo judío de Bruselas, en que murieron cuatro personas.

Nemmouche estaba en la lista de sospechosos de la Dirección General de Seguridad francesa, dependiente del Ministerio del Interior, que le seguía la pista desde principios de 2013, cuando viajó a Siria para enrolarse en la yihad.

Este atentado y la masacre de 'Charlie Hebdo' supone un punto de inflexión en la violencia yihadista en Europa, que en los últimos años casi siempre estaba protagonizada por lobos solitarios, individuos radicalizados pero con muy pocos conocimientos bélicos que, cuando actuaban, lo hacían por su cuenta, solían hacerlo con armas blancas o pistolas, pues no podían acceder a armamento de mayor calibre, y que podían causar una mortalidad limitada. «En cambio, individuos entrenados y con armas automáticas son muchísimo más peligrosos. Además, reciben órdenes desde las cúpulas del Estado Islámico o de Al Qaeda», explicó a este diario una fuente policial dedicada a la lucha antiterrorista.

«Este ataque puede suponer el regreso a los atentados perpetrados en Europa por grandes organizaciones terroristas, que tuvieron en el 11-M en Madrid y el 7-J de Londres su máxima expresión. Si antes Al Qaeda realizaba grandes atentados con explosivos, ahora los grupos Al Qaeda o el Estado Islámico usan a yihadistas curtidos en combate», alerta Javier Jordán, profesor de Ciencias Políticas de la Universidad de Granada y experto en yihadismo. «Ambos grupos disponen actualmente de un gran número de personas con ese perfil», añade.

TEMOR AL 2015

Un responsable de la lucha antiterrorista ha explicado a este diario el temor a un 2015 de atentados en Europa: «No ha sido un ataque cualquiera.

El ataque a 'Charlie Hebdo' demuestra que los yihadistas buscaban dar un gran golpe. Hace mucho que los yihadistas no cometían un gran atentado en Europa y tanto el Estado Islámico como Al Qaeda no paraban de hablar de la necesidad de golpear aquí».

Otro miembro de las fuerzas de seguridad pone el acento en que la puerta de entrada a Europa de esos retornados es Turquía. «Las fronteras turcas son un descontrol. Van y vienen a su antojo», lamenta.