Familia del instructor de tiro muerto por una alumna expresa su pesar por la niña

Los parientes del excombatiente fallecido el pasado lunes han señalado que no quieren que el resto de la vida de la menor gire en todo al accidente

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La familia de Charles Vacca, un excombatiente muerto el lunes pasado por los disparos de un subfusil Uzi que manejaba una niña de nueve años a la que enseñaba a tirar, expresó este viernes su pesar por la menor y su familia.

Vacca, de 39 años y con una carrera militar que le llevó a Irak y Afganistán, trabajaba como instructor de tiro en el polígono Last Stop, de White Hills, en el estado suroccidental de Arizona, donde enseñaba a la niña, no identificada públicamente, cómo debía manejar el arma.

El incidente ha reavivado el debate en Estados Unidos sobre la disponibilidad de armas de fuego y, en este caso, el deseo de muchas familias de que sus hijos aprendan a usarlas desde pequeños. Vacca le mostró a la niña cómo podía disparar hacia un objetivo a cierta distancia, pero el retroceso del arma al accionarla en ráfaga hizo que se le levantara el cañón y lo hiriera en la cabeza, por lo que murió horas después en un hospital, según la oficina del Alguacil del Condado de Mojave.

"Sabemos que éste fue un accidente trágico y es algo con lo que tendremos que vivir", dijo este viernes la hija de Vacca, Ashley, de 19 años, en una entrevista con el programa Today de la cadena de televisión NBC. "Realmente queremos que las oraciones vayan para la familia de esa niña", dijo la hija, que agregó: "No queremos que el resto de su vida gire en torno a esto".

Por su parte, la exesposa de Vaca, Anamarie, dijo en el mismo programa que "Charles era una buena persona, fue un buen padre, quiso a sus hijos mucho y la familia fue importante para él. Su muerte fue un golpe para toda la familia".

Sam Scarmardo, que administra el polígono de tiro donde ocurrió el incidente, señaló que los padres de la niña habían firmado declaraciones que establecían que entendían las normas del lugar y que, cuando se produjo el suceso, que ha sido catalogado como un accidente por las autoridades, estaban cerca y grababan un vídeo de cómo aprendía su hija a usar el arma.

Esta no es la primera vez que un menor está involucrado en un accidente mortal en Estados Unidos con un subfusil Uzi: en 2008, un niño de 8 años murió cuando se disparó en la cabeza en una feria de armas cerca de Springfield, en el estado nororiental de Massachusetts.