La respuesta europea

La UE suspende la venta de armas a Egipto pero no la ayuda

Ashton (a la derecha) habla con varios funcionarios de su departamento, antes de la reunión de Bruselas, ayer.

Ashton (a la derecha) habla con varios funcionarios de su departamento, antes de la reunión de Bruselas, ayer.

EL PERIÓDICO
BRUSELAS

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La Unión Europea endureció ayer el tono en su relación con el nuevo régimen egipcio, pero no en demasía. Los ministros de Exteriores de los Veintiocho, reunidos en Bruselas en sesión extraordinaria para dar una respuesta a la crisis de Egipto, acordaron suspender las licencias de exportación a Egipto de armas o cualquier material de seguridad que pueda ser utilizado con fines represivos. Pero, al menos por el momento, optaron por dejar intacta la ayuda financiera.

«Los estados miembros han acordado suspender las licencias de exportación a Egipto de cualquier equipamiento militar que pueda ser utilizado para la represión interna», anunció la jefa de la diplomacia comunitaria, Catherine Ashton, al término de la reunión. La asistencia en materia de seguridad «será reexaminada», según reza el comunicado.

POCOS EFECTOS/ Esta decisión, que no equivale a un embargo de armas, tendrá pocos efectos prácticos, puesto que la mayoría de países, incluido España, ya habían anunciado individualmente que suspendían la entrega de armas a Egipto a raíz de la crisis. Alemania, Francia y España eran los principales exportadores a Egipto.

Los ministros esgrimieron también ayer una velada amenaza de algún tipo de sanción económica, pero sin concretarla. Se limitaron a afirmar que los Veintiocho concluyeron «revisar la asistencia a Egipto en el bien entendido de que la ayuda a los grupos más vulnerables del país y a la sociedad civil debe continuar».

Por lo demás, reiteraron el llamamiento «a todas las partes» en Egipto a que «se detenga la violencia, se terminen las provocaciones y se acabe con los discursos llenos de odio».

«La UE quiere que todos los partidos se comprometan a un diálogo real e inclusivo que restablezca el proceso democrático», señaló

Ashton. «Queremos continuar manteniendo una relación fuerte con Egipto y ser capaces de ofrecer nuestro apoyo, pero también nos atenemos a nuestros principios y valores y los mantenemos», añadió.

«Los principios en que se basa nuestra política son el apoyo a las instituciones democráticas, no tomar partido», afirmó el ministro de Exteriores británico, Willian Hague, en declaraciones tras el encuentro.

La tímida reacción europea denota un reconocimiento por parte de la UE de su limitada capacidad para forzar un compromiso. También muestra la preocupación de que una respuesta más contundente, como la adopción de sanciones económicas, impediría una futura mediación europea en la crisis.

LA POSICIÓN ESPAÑOLA/ El ministro de Exteriores español, José Manuel García-Margallo, explicó que Madrid decidirá la próxima semana si suspende todas las ventas de material de defensa a Egipto, después de haber paralizado ya la concesión de nuevas licencias de exportación al comienzo de la crisis.

España dejó de aprobar nuevas licencias para la venta de material militar a Egipto después del golpe del pasado 3 de julio que derrocó al presidente islamista, Mohamed Mursi.

Según datos de la Secretaría de Estado de Comercio, España aprobó el año pasado 46 licencias de ventas de material armamentístico a Egipto, por valor de casi 93 millones de euros.

Los ministros de la UE señalaron ayer que cada país revisará si revoca igualmente las licencias concedidas con anterioridad al conflicto, una decisión que, en el caso español, se tomará el próximo 28 de agosto, según explicó García-Margallo al término de la reunión en Bruselas.