ALIVIO EN EL ELÍSEO

El Consejo Constitucional avala la prohibición del burka en la calle

El dictamen apoya el veto por «seguridad» y «orden público»

E. R.
PARÍS

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Suspiro de alivio en el Elíseo. La ley que prohibe el burka en todo el espacio público, incluida la calle, superó ayer un último y delicado obstáculo, el del Consejo Constitucional. El dictamen, vinculante para el Gobierno, valida la legislación en base a la «salvaguarda del orden público» y expresa una única reserva: considera inaplicable la prohibición en «los lugares de culto abiertos al público» por estimar que se pondría en peligro la libertad religiosa.

«La ocultación del rostro en el espacio público, antes casi inexistente, puede constituir un peligro para la seguridad pública y menosprecia las exigencias mínimas de la vida en sociedad», argumenta. Pese a que el Consejo de Estado había prevenido contra una posible inconstitucionalidad del texto, el Consejo juzga la ley conforme a la Carta Magna. Sentencia también que las mujeres que se cubren con el velo integral «se encuentran en una situación de exclusión y de inferioridad incompatible con los principios constitucionales de libertad e igualdad». En cambio, el Consejo de Europa y Amnistía Internacional creen que la ley vulnera la libertad religiosa de las mujeres.

El pasado 14 de septiembre, el Parlamento votó masivamente la ley que permite multar con 150 euros a las mujeres que lleven el burka o el niqab y obligarlas a seguir un curso de ciudadanía en caso de reincidencia. Quien obligue a una mujer a llevar el velo integral podrá ser castigado con un año de prisión y 30.000 euros de multa.

Estas medidas se empezarán a aplicar después de un período informativo de seis meses, destinado a intentar persuadir a las 2.000 mujeres que se cubren el rostro en Francia. Sin embargo, algunas ya han anunciado su rechazo a retirar el velo.