control migratorio

Gadafi pide 5.000 millones para evitar una «Europa negra»

El presidente de Libia recuerda que su país es la puerta de África

El presidente de Libia, Muamar Gadafi, junto al primer ministro italiano, Silvio Berlusconi, en Roma, ayer.

El presidente de Libia, Muamar Gadafi, junto al primer ministro italiano, Silvio Berlusconi, en Roma, ayer.

ROSSEND DOMÈNECH
ROMA

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

«Que Europa ofrezca a Libia por lo menos 5.000 millones de euros al año para parar la inmigración no grata» y evitar así una «Europa negra», de lo contrario «un día podría ser como África». Muamar Gadafi no se quedó corto en la cena con 800 invitados, ofrecida por el presidente del Gobierno italiano, Silvio Berlusconi, la medianoche del lunes.

El presidente libio dio por terminada ayer su visita a Roma, dejando una oleada de críticas de una parte de la misma mayoría conservadora que apoya al Gobierno, de la oposición, de los obispos y de las mujeres. Los únicos que no rechistaron fueron los industriales, algunos de los que ya han empezado a ganar contratas multimillonarias en el país vecino y otros que lo esperan, a medida que se aplique el Tratado de Amistad firmado en el 2008.

Frente a los comensales, el coronel dijo textualmente: «Libia, apoyada por Italia, pide que la UE ofrezca, al menos, 5.000 millones de euros por año para parar la inmigración no grata, porque hay que sostener este Ejército que combate para parar la inmigración, de otro modo un día Europa podría convertirse en África, podría transformarse en negra». «Libia -añadió- es la puerta de la inmigración no deseada», por lo que «tenemos que luchar juntos para afrontar este desafío».

RETIRADA DE LA FLOTA DE EEUU / El discurso prosiguió pidiendo, entre otras cosas, que se alejen del Mediterráneo todas las flotas militares que no sean de un país ribereño (la única estable es la VI de EEUU).

Los indocumentados que cruzan el canal de Sicilia representan, según Interior y Cáritas, solo el 20% de los que llegan a Italia (la mayoría entra a través de los aeropuertos) y muchos de ellos tendrían, según la ONU, los requisitos para ser acogidos como refugiados. Pero son rechazados en alta mar hacia Libia, antes de poder ser examinados por el Alto Comisionado para los Refugiados de la ONU.

Todos los partidos de la mayoría y oposición han criticado el énfasis dado a la visita. En respuesta a una frase de Gadafi, pronunciada durante dos lecciones sobre el Corán impartidas a casi 700 chicas sobre la islamización de Europa, el diario La Padania de la Liga del Norte, aliada de Berlusconi, tituló ayer con toda la primer página: «Europa sea cristiana». «Una exhibición que se transforma en búmeran», tituló de su parteAvvenire, diario de los obispos italianos, preguntándose en «cuántos otros países Gadafi habría podido hacer proselitismo».

El diario definió sus exhibiciones como «una demostración de cuánto, incluso en un islam ya no considerado extremista, se pueden confundir el plano político y el religioso». Berlusconi respondió a quien no avala el tratado que es «prisionero de esquemas superados».