INTENTABA HUIR DE SU CASA

El Ejército mata al presidente de Guinea Bissau tras un atentado mortal contra el jefe del Estado mayor

"Ahora vamos a arrancar. Ese hombre bloqueaba todo en este pequeño país", dice un oficial sobre el mandatario

AFP
BISSAU

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El presidente de Guinea Bissau, Joao Bernardo Vieira, ha muerto a primera hora de hoy a manos de militares después de un atentado con bomba que anoche costó la vida al jefe del Estado mayor, según ha informado un responsable castrense.

"El Ejército ha matado al presidente Vieira cuando intentaba escapar de su casa, atacada por un grupo de militares cercanos al jefe del Estado mayor, Tagmé Na Wai, esta mañana temprano", ha asegurado el responsable militar de Relaciones Exteriores, Zamura Induta.

"Era uno de los principales responsables de la muerte de Tagmé", ha afirmado ese responsable militar. "Ahora vamos a arrancar. Ese hombre bloqueaba todo en este pequeño país", ha dicho ese oficial.

23 años en el poder

Joao Bernardo Vieira (alias Nino), de 69 años, ha pasado prácticamente 23 años al frente de Guinea Bissau. Fue reelegido a la presidencia de este país del oeste de África en el 2005, nueve años después del fin de una guerra civil que duró 11 meses y que lo había expulsado del poder.

El jefe del Estado Mayor de las Fuerzas Armadas, el general Tagmé Na Wai, murió ayer en un atentado con bomba perpetrado contra el cuartel general del Ejército, según su jefe de gabinete.

Saqueada la casa de Vieira

Según un testigo contactado por AFP, la residencia privada del presidente ha sido saqueada. "Hemos visto a militares retirar todo lo que había en el interior de la residencia privada del presidente, sus efectos personales, sus muebles, todo", ha explicado un testigo.

El 23 de noviembre pasado, un grupo militar perpetró un ataque nocturno contra la residencia del presidente Vieira que causó dos muertos entre sus guardias.

Guinea Bissau es uno de los países más pobres del mundo y, desde que obtuvo la independencia de Portugal en 1974, ha sufrido varios golpes de estado. En los últimos años, se ha convertido en centro de paso del tráfico de cocaína de Latinoamérica a Europa y altos cargos del Gobierno y jefes militares han sido acusados de participar en este negocio ilegal.