ENTREVISTA con Shirin Ebadi, PREMIO NOBEL DE LA PAZ Y DEFENSORA DE LOS DERECHOS HUMANOS

Shirin Ebadi: "De la revolución iraní solo queda hoy el desencanto"

Resolutiva  Shirin Ebadi, ayer, en la sede de la Casa Àsia, en Barcelona.

Resolutiva Shirin Ebadi, ayer, en la sede de la Casa Àsia, en Barcelona.

JORDI CORACHÁN
BARCELONA

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AÑO DE NACIMIENTO 1947

LUGAR HAMADÁN (IRÁN)

FORMACIÓN ABOGADA

TRAYECTORIA FUE LA PRIMERA JUEZA DE IRÁN, EN 1974. CINCO AÑOS DESPUÉS LE PROHIBIERON EJERCER LA ABOGACÍA POR SER MUJER

Shirin Ebadi es una mujer pequeña, pero pertinaz. Su vida es como una montaña rusa: jueza del Tribunal de Teherán (1974) y luego condenada al ostracismo (1979) al impedirle el régimen iraní ejercer de abogada; es la única mujer musulmana que ha recibido el Premio Nobel de la Paz (2003) y le clausuraron (2008) el Centro de Defensores de los Derechos Humanos.

--La persiguen, pero usted no se rinde.

--Me cierran la oficina y me atacan de manera sistemática en la tele y en los diarios. Intentan hacer creer que no soy una buena musulmana. De este modo, el Gobierno busca condenarme ante la opinión pública. Lo último que han dicho es que no apoyo la causa palestina, pero cuando me han cerrado la sede los palestinos han sido los primeros en protestar.

--¿Cuál es su delito?

--Dicen que atento contra los intereses de Irán y que no respeto las leyes islámicas porque las critico. Y las critico porque son una mala interpretación del islam. A mi juicio, el islam es compatible con los derechos humanos y la democracia.

--Treinta años de revolución iraní y las cosas están más o menos como con el sah.

--La situación de los derechos humanos ahora es mejor que hace 28 años con el ayatolá Jomeini. En aquella época condenaban a una persona a muerte con un juicio de cinco minutos, pero las cosas están algo mejor. El sah provocó que el pueblo iraní hiciese la revolución.

--¿Cree que el pueblo está hoy contento?

--No. Absolutamente, no. De aquella revolución solo queda hoy el desencanto. Hay muchos problemas, pero me referiré solo a dos. En un accidente de tráfico, por la vida de una mujer pagan la mitad que por la de un hombre y, en los juicios, el testimonio de dos mujeres vale por el de un hombre. Además, lapidan a gente, les cortan la mano a los ladrones, crucifican y despeñan a personas de los montes. Irán es el país del mundo que ejecuta a más niños. Tampoco hay libertad de expresión y si algún medio critica la Constitución islámica, lo cierran.

--¿Hace falta otra revolución?

--Lo que está claro es que el régimen caerá cuando los iranís quieran.

--En marzo hay elecciones.

--Sí, pero las elecciones no son libres. Quiero decir que las personas no son libres y que los candidatos deben ser aprobados por el Consejo de los Guardianes de la Revolución.

--Pero, se presenta el reformista Mohamed Jatamí. ¿Qué opina?

--Como activista de los derechos humanos no puedo hablar de políticos concretos.

--¿Usted podría presentarse?

--Yo no lo haría nunca, pero no podría. Las mujeres no podemos aspirar a la presidencia.

--¿Piensa que los iranís apostarán por un cambio?

--Los reformistas son muy fuertes en Irán. La democracia es una cultura que afortunadamente está arraigada entre los iranís.

--¿El triunfo de Obama puede facilitar ese cambio?

--No. El cambio lo deben protagonizar los iranís.

--Pero Barack Obama ha declarado que Irak, Afganistán e Irán figuran entre sus prioridades.

--Bueno, bueno. Yo le recordaría que la democracia no se impone, y menos mediante las bombas.

--El presidente de EEUU y medio mundo parecen estar preocupados por el programa nuclear iraní.

--¿Por qué no se preocupan por el de Pakistán o la India? ¿O el de China? ¿O el de Israel?

--Por favor, dígamelo usted.

--El asunto de fondo debe ser el fin de la competición nuclear. El mundo debe quedar libre de armas nucleares.

--Disculpe, en este mundo parece que uno no es nadie si no tiene la bomba atómica.

--Sí, pero yo estoy en contra de la bomba atómica, sea del país que sea. Una vez se utilizó en Japón y ya vimos los efectos perniciosos para la población de Hiroshima y Nagasaki, que todavía perduran.

--Los estadounidenses dijeron que gracias a ellas se acabó la segunda guerra mundial.

--Eso es propaganda. Tenemos que utilizar la cabeza y no creer todo lo que nos dicen. La guerra ya había terminado. Se trataba de ensayar esos artilugios nucleares.

--El presidente iraní, Mahmud Ahmadineyad, estaría encantado con tenerlos.

--Estoy segura.

--Con sus amenazas ha conseguido que Obama suavice su posición respecto a Irán.

--Los dos deben reunirse y tener un diálogo abierto y profundo. Si EEUU e Irán mejoran sus relaciones, se beneficiarán los pueblos respectivos. Y eso es lo esencial.