Una marea humana despide en Beirut al ministro asesinado

EFE / BEIRUT

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Una marea humana se ha congregado en Beirut, donde se han celebrado los funerales del ministro de Industria, Pierre Gemayel, de 34 años, asesinado el martes. Centenares de miles de personas se han congregado en la plaza de los Mártires y delante de la catedral de San Jorge, en medio de draconianas medidas de seguridad debido a la tensión que vive el país, dividido entre pro y antisirios.

El ambiente patriótico, con banderas libanesas ondeando sin cesar, recordaba al vivido en febrero del 2005 en los funerales del exprimer ministro Rafic Hariri, también asesinado con una bomba.

La llegada del féretro a la catedral portado por sus seguidores ha estado acompañada de aplausos y por el sonido de las campanas de las iglesias. La entrada a la catedral solo estaba permitida a familiares y personalidades, entre ellas el ministro francés de Asuntos Exteriores, Philippe Douste-Blazy, el secretario general de la Liga Árabe, Amr Musa, embajadores y dignatarios religiosos de todas las comunidades.

Abucheos contra la oposición prosiria

La llegada de las autoridades ha estado acompañada unas veces por aplausos y otras por abucheos. Las críticas se han dirigido contra los diputados de la oposición prosiria. Sin embargo, la llegada del jefe del Parlamento, Nabih Berri, también prosirio, que ha sorprendido a todos, ha sido acogida con aplausos.

El féretro de Gemayel fue traído en brazos hasta la catedral, envuelto con la bandera libanesa y la de su partido, de inspiración derechista y cristiana.

A medida que el féretro avanzaba se iban oyendo insultos y gritos contra Siria, país al que acusan de la muerte de Gemayel. Los participantes portaban pancartas con el lemaSiria, basta de matar al régimen(libanés),Somos rehenes de Israel, Siria e Irány una foto del presidente sirio, Bachar Al Asar, con el lemaNos empuja hacia una guerra civil.

Otras pancartas iban contra el presidente Emile Lahud (prosirio), que no ha asistido al funeral "para no poner en aprietos a algunos", según sus palabras. Una pancarta prometía a Lahud:Pronto te veremos ante el tribunal.

En la localidad de Bikfaya, ya esta mañana se habían concentrado miles de personas para despedir al ataúd de Gemayel en su viaje a Beirut.

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