Giuliani prepara el asalto de la Casa Blanca en el 2008

Ggiuliani, presidente. Aunque las pancartas aún no están listas, el celebérrimo exalcalde de Nueva York, Rudolph Giuliani, dio ayer el primer paso para saltar a la carrera por la Casa Blanca en el 2008, al establecer un comité exploratorio de sus posibilidades presidenciales. "Aún no ha tomado la decisión" de si se presentará a las elecciones, advirtió uno de sus colaboradores, en un intento de controlar la expectación sobre si el exalcalde más famoso del país, catapultado a la fama por el 11-S, se lanzará a la principal competición política de EEUU.

Medios no le van a faltar pues, de entrada, Giuliani supera a cualquier otro político de su partido, el republicano, en cuanto a respaldo popular, según los sondeos. Si los comicios presidenciales fuesen ahora, el exalcalde triunfaría sobre otros probables rivales republicanos, como el senador John McCain o, incluso, la secretaria de Estado, Condoleezza Rice, pues encabeza la lista de favoritos de los votantes republicanos.

APOYO POPULAR

Pero también entre la población general, Giuliani pisa un territorio muy sólido, ya que está empatado en apoyo popular --un 47%-- con la figura demócrata que encabeza el pelotón de posibles aspirantes presidenciales de su partido, la exprimera dama y actual senadora por Nueva York Hillary Clinton. Hoy por hoy, el exalcalde derrotaría también a otros posibles candidatos demócratas de peso, como el senador negro por Illinois, Barack Obama.

La fuerza de Giuliani radica en la imagen de dignidad y fortaleza que ofreció a la nación tras los ataques terroristas del 11-S, cuando se alzó como un héroe, guiando con pulso firme la alcaldía neoyorquina en aquellos días negros del 2001. El recuerdo indeleble que ha dejado en la mente de los estadounidenses explica la opinión favorable que tienen de él un 63% de los ciudadanos, frente al 27% que le ven desde el extremo contrario, según los sondeos.

EL AÑO QUE VIENE

"Me decidiré al año que viene", clarificó él mismo el pasado domingo, mientras hacía campaña en pro de los candidatos republicanos a las elecciones legislativas. El exalcalde, cuyas opiniones son demasiado conservadoras para los neoyorquinos pero resultan centristas para la América profunda, se retiró de la política cuando salió de la alcaldía y montó una empresa de consultoría sobre temas de seguridad, Giuliani Capital Advisors LLC. Además, cosechó los beneficios de su gran popularidad dedicándose a la lucrativa actividad de pronunciar conferencias por todo el país.