El Tribunal Català de Contractes desbloquea una licitación de bus interurbano de L'Hospitalet y el Baix

El Tribunal Català de Contractes del Sector Públic ha rechazado los recursos presentados por sindicatos, patronal y la empresa TUGSAL al concurso del Àrea Metropolitana de Barcelona (AMB) para la concesión del servicio de buses interurbanos entre L’Hospitalet de Llobregat, el Prat, Cornellà, Esplugues, Sant Joan Despí, Sant Just Desvern y Sant Feliu de Llobregat.

De este modo, después de que se alargara el contrato a falta de un nuevo adjudicatario, el Tribunal permite al AMB que la licitación prospere. Se trata de un contrato a siete años -más una prórroga de otros tres años como máximo- cuyo valor estimado es de casi 263 millones de euros.

El 27 de diciembre de 2021, se publicó el anuncio de la licitación del servicio de bus que hasta ahora ofrece la empresa Rosanbus SL. Era la tercera vez que se presentaba este concurso, ya que las anteriores veces se tumbó porque el Tribunal detectó irregularidades administrativas en los mismos.

En este último concurso, explica el director del Centre d’Estudis de Transport Terminus, Joan Carles Salmerón, pasó algo “histórico”: patronal y sindicatos presentaron el 18 de enero de 2022 un recurso de forma conjunta contra los pliegues reguladores de la licitación y la memoria económica.

Sindicatos y patronal valoran “posibles escenarios”

Así, estos recursos se sumaron al que había presentado un día antes la empresa TUGSAL, que también recurrió el anterior concurso -en esa ocasión con resultado favorable para la empresa que gestiona el servicio interurbano en el Barcelonès Nord-. El Tribunal Català de Contractes, como medida cautelar, paralizó el nuevo concurso hasta analizar las demandas de las partes y decidir si volvían ser necesarias modificaciones o no.

Finalmente, a la tercera ha ido la vencida para el AMB. El Tribunal tumbó todas las alegaciones y levantó así la suspensión del procedimiento de contratación, agotando así la vía administrativa a sindicatos, patronal y empresas. No obstante, la resolución no impide que las partes, de encontrarlo necesario, puedan interponer un recurso contencioso administrativo en el Tribunal Superior de Justícia de Catalunya (TSJC).

Consultada por esta posibilidad, desde la patronal FECAV explican que están estudiando la resolución y coordinándose con los sindicatos CCOO y UGT -los dos que interpusieron el recurso a principios de año- para “valorar posibles escenarios”.

Finalización de contrato de las tres líneas históricas del Baix

Salmerón explica como, históricamente, en el área del Baix Llobregat han existido tres grandes empresas que, hasta los últimos años, se han encargado del servicio de bus interurbano de la zona. Estas empresas han sido: Mohn, Oliveres y Rosanbus, que estaban unidas en el grupo Baix Bus, aunque cada empresa era su propia SL.

Así, las concesiones del AMB en esta zona han ido caducando los últimos años y han salido a concurso. Las concesiones de Mohn caducaron hace unos años y, tras resolverse todos los concursos y recursos administrativos, el año pasado empezó a prestar servicio el nuevo operador: Avanza.

“También, después de muchos recursos, el 16 de julio de este años las concesiones de la antigua Oliveres han pasado a Monbus, con sede en Galicia, pero que opera en muchas partes”, explica el director de Terminus.

De este modo, tras la resolución del Tribunal Català de Contractes se desbloquea el camino de la tercera y última pata de los buses interurbanos del Baix Llobregat -la de Rosabus- pendiente de adjudicarse.

Quejas por los nuevos servicios

“En los concursos que han salido adelante, como los que han ganado Avanza o Monbus, ha primado mucho la parte económica y no tanto la de calidad del servicio”, resume Joan Carles Salmerón.

“FECAV y sindicatos estaban de acuerdo en criticar que se escoja la oferta económica más preferente, que da demasiados puntos. Luego vienen empresas de fuera a reventar el concurso y esto acaba afectando al pasajero”, añade el director de Terminus, que recuerda todas las quejas de pasajeros y conductores que ha generado en el último año el servicio de Avanza.

En estos últimos meses, "tanto por el concurso que ganó Avanza como el de Monbus, hay escenas esperpénticas de pasajeros esperando porque los autobuses no pasan o montones de vehículos estropeados que antes no se habían visto", añade Salmerón.

Tal como ya publicó EL PERIÓDICO, a mediados de este mes de septiembre hubo días en que se llegaron a contabilizar una cincuentena de incidencias entre las líneas de Avanza que dan servicio diurna y nocturnamente en grandes municipios catalanes como Castelldefels, Gavà, Viladecans, El Prat, Cornellà, Sant Boi, L'Hospitalet de Llobregat y sus respectivas conexiones con Barcelona.

A pesar del número de incidencias, fuentes del AMB, que reconocieron entonces la "dificultad" del pasado mes de julio, aseguraron que el servicio se prestaba en septiembre "con normalidad" y enfatizaron la "drástica reducción de las quejas de los usuarios". No obstante, el Àrea Metropolitana de Barcelona ha impuesto recientemente una sanción de 300.000 euros a Avanza por incumplimientos de la ejecución del contrato del servicio público del transporte interurbano.

La administración pública del territorio metropolitano informó el mes pasado que, entre las cláusulas del contrato que no se han cumplido, se encuentra la falta de flota disponible y por ende, la no sustitución de vehículos averiados. Desde el inicio del servicio y hasta poco antes de interponer la multa, según el AMB, se habían recibido por parte de las personas usuarias del servicio 624 quejas relacionadas con autobuses que no pasaron por la parada a la hora correspondiente a su expedición.

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