Vecinos de L’Hospitalet cortan calles para reclamar más espacios verdes

Vecinos de L'Hospitalet de Llobregat (Barcelonès) cortaron las calles de la ciudad para reclamar espacios verdes y para "frenar la lógica de la construcción" y que se "regalen" los espacios públicos a las constructoras. Así lo explicó a la ACN Raúl Alhabla, representante de la plataforma ‘Un Altre Hospitalet És Possible'. En concreto, se llevaron a cabo dos cortes: uno en el barrio de Collblanc y el otro en el de Sant Josep, frente a la antigua fábrica Cosme Toda, en el marco de la campaña 'Confinemos a los coches. Recuperemos La Ciudad'.

"En una situación de emergencia climática y de pandemia sanitaria, es más urgente recuperar espacios públicos", destacó Alhabla. La cita, que mantuvo un ambiente festivo, estuvo acompañada de las percusiones de los grupos Kabra y Fills de la Flama. "Necesitamos que se hagan calles peatonales en cada barrio, en Collblanc, Torrassa, La Florida, Sant Josep...", dijo Marcela Kasparian, también de la plataforma ‘Un Altre Hospitalet És Possible', quien lamentó que tienen menos zonas verdes de lo que recomienda la Organización Mundial de la Salud. En el transcurso de la marcha, citaron que el índice de zona verde es de 4 m2 por habitante, muy lejos de los 10-15 m2 por habitante.

"Nos preocupa como la ciudad no ha priorizado arterias peatonales que conecten los barrios y que se tenga que salir fuera de la ciudad para hacer deporte y disfrutar del espacio abierto", agregó Alhabla.

Los organizadores también destacaron el corte frente a la antigua fábrica Cosme Toda, en el barrio de Sant Josep, ya que aseguraron que es una "pieza clave del patrimonio histórico de la ciudad y que está afectada por un proyecto que prevé la construcción de 32 bloques de pisos en sus inmediaciones, un total de 1400 viviendas".

“Espacios libres”

La coordinadora de colectivos y entidades ‘Un Altre Hospitalet És Possible' reúne a una cuarentena de entidades y esta no es la primera acción que se hace en esta línea. La plataforma ve con “preocupación” como "el escaso y valioso espacio disponible que queda en la ciudad se entrega a las constructoras para masificar aún más los barrios".

La coordinadora considera que el consistorio "ha descuidado la apuesta por una ciudad pensada por y para las personas. Los espacios libres para el uso público son insuficientes y en las zonas con más población no se ha planificado ni priorizado arterias de peatones por donde poder pasear entre barrios".

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