Hasta el 9 de mayo

La Fundació Arranz-Bravo de L’Hospitalet acoge ‘Narrativas tácitas’, de Andrea Leria

La muestra está dividida en cuatro grandes ámbitos, donde se construye el universo familiar de la artista

‘Narrativas tácitas’, de Andrea Leria.

‘Narrativas tácitas’, de Andrea Leria. / Ayuntamiento de L'Hospitalet

El Periódico

El Periódico

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

La artista Andrea Leria expone en la Fundació Arranz-Bravo de L’Hospitalet de Llobregat (Barcelonès) una recopilación de obras donde están presentes la memoria, las impresiones familiares, los recuerdos y los espacios de niñez que han acondicionado y construido su identidad. Nacida en Barcelona, “su existencia ha estado marcada por su traslado a Santiago de Chile cuando era muy pequeña”, señalan desde el Ayuntamiento de L’Hospitalet.

La vuelta a Barcelona en 2014 y el reencuentro con su abuela la ponen en contacto con un pasado que ha sido central para la consolidación de su universo artístico. Entra también en contacto con un importante archivo familiar formado por cartas, postales, fotografías y diapositivas familiares que le han permitido construir la exposición Narrativas tácitas.

La exposición, a cargo de Albert Mercadé, se puede visitar desde este 18 de febrero y hasta al 9 de mayo, de jueves a sábado de 17 a 20 horas, y los domingos, de 11 a 14 horas.

Cuatro etapas

Para esta exposición, Leria ha configurado cuatro momentos de su pasado archivístico. Léxico familiar nace de la convulsión sufrida por el artista después de darse cuenta de la persistencia del formato de la fotografía familiar de grupo. A través de redes invisibles, Leria une pictóricamente los protagonistas de las imágenes familiares. Como contrapunto individual, en Archivum-self, la artista interviene fotografías y retratos de familia donde inserta su rostro para fusionarlo fantasmagóricamente sobre los rastros humanos del pasado familiar.

En Jardines de resistencia, Andrea Leria introduce un retrato ambiguo e intenso, envuelto en un fajo de cartas troceadas. Son cartas auténticas de su abuela Montserrat Borès con secretos de familia, dolorosos y sobrecogedores, a los que la artista tuvo acceso. La reacción instintiva fue la destrucción de un pasado que quiere enterrar y, al mismo tiempo, eternizar en el elixir de la obra.

En el último de los ámbitos, Trazos esquivos, Leria activa todo un legado de diapositivas familiares de posguerra de su tío abuelo que proyectan las inquietudes lúdicas de sus antepasados, fotografías de astros y de paisajes. 

Más noticias de L'Hospitalet en la edición local de EL PERIÓDICO DE CATALUNYA