Trabajadores del Hospital de Bellvitge critican las condiciones de sanitarias embarazadas en el Estado

Trabajadores del Hospital de Bellvitge de L'Hospitalet de Llobregat han convocado una protesta ante el centro este miércoles a las 12.30 horas por las condiciones en las que trabajan profesionales embarazadas en todo el Estado debido a que se ha retrasado la suspensión del contrato por riesgo en el embarazo para este sector, y con el fin de que, en este caso, "la empresa se pronuncie y la mutua rectifique los criterios".

En declaraciones a Europa Press, fuentes del CGT en el hospital han lamentado que desde enero hay un cambio en los criterios por los que se permite a las embarazadas a tener la suspensión de contrato por riesgo en el embarazo a partir de las 30 o 33 semanas (7 meses), en lugar de las 20 anteriores: "La solución que nos dan es que cojamos la baja común, pero las embrazadas no estamos enfermas".

Han alertado de que trabajar con un embarazo de siete meses es un riesgo tanto para médicos, enfermeras, técnicas, celadoras y el resto de profesionales, ya que por ejemplo en Urgencias se desconoce si un enfermo está infectado al llegar, y en ocasiones reciben golpes de pacientes desorientados.

Pueden entrar en contacto con enfermedades nosocomiales -infecciones adquiridas en hospitales- como la Klebsiella, pero "también se pone en peligro a los enfermos, porque estando embarazada no se puede empezar a hacer la reanimación cardiorrespiratoria (RCP) por el esfuerzo físico" que requiere.

TRES TRABAJADORES AISLADOS

Actualmente hay tres trabajadores aislados por haber estado en contacto con el sarampión, lo que supondría un alto riesgo si sucediera en una embarazada, y han apuntado que han habido casos de gestantes que han tenido que administrarse antibióticos intravenosos por un posible contacto con meningitis, mientras que profesionales de Anatomía Patológica trabajan con productos cancerígenos, así como los de Radiología.

Fuentes de Bellvitge consultadas por Europa Press han señalado que se trata de una problemática estatal, pero que cuando el centro tiene constancia de una profesional embarazada, la Unidad Básica de Prevención valora el riesgo al que está expuesta, y "si hay riesgo y no puede ofrecerle otro lugar de trabajo, inicia la gestión para que la Mutua active la prestación por embarazo de riesgo".

Han dicho que son conscientes de que la aplicación de los criterios de la nueva 'Guía de Ayuda para la valoración del riesgo laboral durante el embarazo' "genera debate y protestas sindicales, pero esta es una publicación del Instituto Nacional de la Seguridad Social".

Este documento ha sido avalado por la Sociedad Española de Ginecología y Obestetrícia (SEGO), han añadido, y fuentes de la Conselleria de Salud de la Generalitat consultadas por Europa Press se han remitido a la respuesta del centro.