JORNADA DE HUELGA JUDICIAL

La jueza decana de L'Hospitalet, Lidia Ureña, denuncia la obsolescencia del sistema judicial español

La jueza decana de Barcelona, Mercè Caso, junto a la fiscal provincial, Concepción Talón y la decana de L'Hospitalet, Lidia Ureña, durante la comparecencia

La jueza decana de Barcelona, Mercè Caso, junto a la fiscal provincial, Concepción Talón y la decana de L'Hospitalet, Lidia Ureña, durante la comparecencia / ACN

ACN / EFE

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La jueza decana de L’Hospitalet, Lidia Ureña, ha denunciado la situación obsoleta en que se encuentra el sistema judicial español y el desbordamiento de los juzgados civiles, en una comparecencia ante los medios producida ayer durante la huelga convocada por las asociaciones judiciales en todo el país.

Ureña quiso comparecer en una rueda de prensa junto a la jueza decana de Barcelona, Mercè Caso, para explicar los motivos de la huelga, que secundaron ayer el 62,6% de los jueces y magistrados catalanes, según el TSJC, y que supuso la suspensión de cerca de 730 actos judiciales en toda Catalunya.

La jueza expresó la delicada situación que atraviesa el sistema judicial y que afecta de pleno a toda la ciudadanía: “No se trata de una huelga en interés del colectivo de jueces o fiscales, sino en interés del ciudadano. Porque no perdamos de vista que la justicia es un servicio público, y si no se presta en términos de calidad y eficacia, el que padece es sobre todo y, ante todo, el ciudadano”.

Las asociaciones de jueces y fiscales justificaron en un comunicado la huelga conjunta ante el “profundo malestar” con todos los responsables del sector, de los grupos parlamentarios al Gobierno y el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), por la “dejación y abandono” en el que se encuentra este servicio público.

Por su parte, Mercè Ocaso destacó durante la rueda de prensa el “gran seguimiento” de la huelga y recalcó las reivindicaciones de jueces y magistrados: mejoras salarialesaumento del personal y una mejora de las instalaciones judiciales en toda Catalunya.

Asimismo, el colectivo exige la reforma del CGPJ, de forma que 12 de sus 20 vocales sean elegidos directamente por los magistrados para garantizar su independencia respecto al poder político.

La decana de Barcelona afirmó que entre 2005 y 2009 se duplicaron los casos en la jurisdicción social, pasando de 27.000 a 40.000 sin que eso supusiera un aumento de personal. Algo que remarcó Ureña, que manifestó que los juzgados civiles de la ciudad están doblando su volumen de trabajo sin que haya ningún refuerzo.

La jueza de L’Hospitalet quiso además remarcar que las huelga se hacía “reiterando por enésima vez” las reivindicaciones que se llevan haciendo desde el año 2009, “con la diferencia que desde entonces han aumentado los problemas y eso se sigue sustentando por una infraestructura judicial en gran medida obsoleta y escasa”.

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