Adheridos a las rocas tras milenarios procesos erosivos de la tierra, los minerales resurgen en altas concentraciones de gran calidad en la España vaciada, despensa europea de metales estratégicos del futuro como las tierras raras, el coltán, el cobalto, el litio o el telurio, capaces de rejuvenecer con 25.000 nuevos puestos de trabajo las comarcas más despobladas, según los empresarios del sector. Son materias primas muy escasas en el continente y vitales para la Unión Europea en su defensa de la transición ecológica para la era 'pos-covid' que impulsará la industria y fabricación de altas tecnologías en un escenario mundial acaparado por China, el país precisamente desde el que se expandió por todo el planeta el coronavirus.