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Carlos Herrera no escapa de la justicia: una sentencia confirma la cifra que debe pagar a Hacienda

El locutor radiofónico hace frente a una demanda millonaria por haber ocultado ingresos al organismo tributario para pagar menos IRPF

Revilla responde a Carlos Herrera y aclara si cobra por hablar del rey emérito en TV

El periodista Carlos Herrera.

El periodista Carlos Herrera.

Pol Langa

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La justicia ha tumbado el recurso de Carlos Herrera por presuntamente haber ocultado ingresos de su actividad profesional a Hacienda durante los años 2006 y 2007, cuando colaboraba para emisiones como Onda Cero.

Según la sentencia que ha recogido El Confidencial, el periodista habría usado un "entramado empresarial" para realizar los cobros por sus trabajos en los medios con los que colaboraba en los años mencionados, permitiéndole así tributar basándose en el impuesto de sociedades y ahorrándose un buen pellizco de IRPF.

Sin embargo, el periodista defendía que en el año 2012 ya había abonado la cantidad que ahora se le reclama, ni más ni menos que 2.115.670,29 euros, aunque ante el reciente rechazo a su defensa le hace valorar la posibilidad de pedir la devolución del importe.

Según la justicia, ese entramado fue creado únicamente con el objetivo de ahorrarse el pago del impuesto, y no para cobrar ningún beneficio, como sostiene la parte acusada. Así, se apunta a que la empresa no contaba con "los medios personales y materiales" para que se pudiera desarrollar ningún "servicio de radiodifusión".

Tampoco lo habrían hecho el resto de empresas que bebían de la compañía madre, aunque el periodista defiende "su actividad independiente".

También cuestiona la forma de establecer lo que debería haber pagado, pues la Agencia Tributaria recalculó los ingresos que Herrera cobró y los sometió al IRPF correspondiente, dando como resultado la abultada cifra de más de dos millones de euros.

Para ello, el organismo impositivo se ha fijado en una sentencia previa del Tribunal Supremo donde ya se había hecho referencia a este caso, aunque en la parte del impuesto de sociedades.

Entonces, el locutor radiofónico pagó más de 800.000 euros a la empresa por "cuotas ingresadas en exceso". Todo ello, terminó con una sentencia de 2021 en la que se anulaban las liquidaciones de su empresa, aunque finalmente, se reabrió a petición de la Abogacía del Estado.