Adidas pone fin a la colaboración con Kanye West por su antisemitismo y su discurso de odio

Adidas AG va a poner fin inmediatamente a su asociación con Kanye West, ha afirmado este martes el fabricante de artículos deportivos, reaccionando a una serie de comportamientos ofensivos del rapero y diseñador estadounidense.

La decisión se produce después de que Adidas pusiera la relación, que ha producido varias zapatillas de marca Yeezy de gran éxito, en revisión a principios de este mes tras sus esfuerzos por resolver el asunto de forma privada.

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"Adidas no tolera el antisemitismo ni ningún otro tipo de discurso de odio", ha afirmado la empresa alemana. "Los recientes comentarios y acciones de Ye han sido inaceptables, odiosos y peligrosos, y violan los valores de la compañía de diversidad e inclusión, respeto mutuo y equidad", explicó, refiriéndose al rapero por su nombre legal.

El fin de la asociación y de la producción de productos de la marca Yeezy, así como el cese de todos los pagos a Ye y sus empresas, "tendrá un impacto negativo a corto plazo" de hasta 250 millones de euros (248,90 millones de dólares)" en los ingresos netos de Adidas este año, afirmó la compañía.

Gap y Balenciaga también toman medidas

Ye ha sido objeto de controversia en los últimos meses al poner fin públicamente a importantes vínculos corporativos y debido a sus arrebatos en las redes sociales contra otras celebridades. Sus cuentas de Twitter e Instagram fueron restringidas, y las plataformas de medios sociales eliminaron algunas de sus publicaciones en línea que los usuarios condenaron como antisemitas.

En unas publicaciones de Instagram de principios de año, que ya han sido borradas, el artista, ganador de varios premios Grammy, acusó a Adidas y al minorista de ropa estadounidense Gap Inc. de no construir las tiendas permanentes prometidas por contrato para los productos de su línea de moda Yeezy. Asimismo, también acusó a Adidas de robar sus diseños para sus propios productos.

El martes, Gap, que había terminado su asociación con Ye en septiembre, dijo que estaba tomando medidas inmediatas para retirar los productos de Yeezy Gap de sus tiendas y que había cerrado YeezyGap.com.

"El antisemitismo, el racismo y el odio en cualquier forma son inexcusables y no se toleran de acuerdo con nuestros valores", dijo Gap en una declaración. La empresa estaba vendiendo las existencias de Yeezy Gap hasta el periodo de liquidación.

Asimismo, la casa de moda europea Balenciaga también ha cortado los lazos con Ye, según los medios de comunicación. "La saga de Ye... subraya la importancia de investigar a fondo a las celebridades y evitar a las que son demasiado polémicas o inestables", dijo Neil Saunders, director gerente de GlobalData.

Adidas arrebató a Ye de su rival Nike Inc en 2013 y acordó una nueva asociación a largo plazo en 2016, en lo que la compañía llamó entonces "la asociación más significativa creada entre un no atleta y una marca deportiva." La unión ayudó a la marca alemana a cerrar la brecha con Nike en el mercado estadounidense.

Las zapatillas Yeezy, que cuestan entre 200 y 700 dólares, generan unos 1.500 millones de euros en ventas anuales para Adidas, lo que supone algo más del 7% de sus ingresos totales, según estimaciones de Telsey Advisory Group.

Las acciones de Adidas, que recortó sus previsiones para todo el año la semana pasada, cerraron con un descenso del 3,2%. El grupo dijo que proporcionaría más información como parte de su próximo anuncio de resultados del tercer trimestre el 9 de noviembre.